Eletrobras planea una inversión de 5.980 millones de dólares hasta 2022

La compañía pública brasileña Eletrobras, que figura en los planes de privatización que elabora el Gobierno del presidente Michel Temer, anunció hoy que planea realizar inversiones del orden de los 5.980 millones de dólares hasta el año 2022.

Eletrobras es la mayor empresa de energía del país y el Gobierno la incluyó en un ambicioso plan de privatizaciones que ha generado algunas reacciones encontradas en los mercados financieros.

La venta del control de esa compañía que gestiona la generación, transmisión y distribución de electricidad en Brasil fue anunciada en el marco de un duro programa de ajustes destinado a acabar con un crónico y elevado déficit fiscal.

Según el Gobierno, el negocio pudiera representar ingresos por unos 20.000 millones de reales (unos 6.060 millones de dólares), una cifra casi equivalente a la del plan de inversiones presentado hoy por la compañía, que incluye mejoras en todas las áreas en que actúa la empresa.

A pesar de la intención de privatizar la compañía, el Gobierno aún no ha definido el modelo que será propuesto y se debate entre la posibilidad de vender parte de sus acciones o la oferta directa de una parte del capital a inversores privados.

Según algunas autoridades del Gobierno, la intención es “diluir” la participación del Estado en la empresa “a menos de un 50 %”.

También está decidido que la privatización de Eletrobras excluirá a la hidroeléctrica de Itaipú, que Brasil comparte con Paraguay, y a las plantas nucleares operadas por la compañía.

La decisión del Gobierno, anunciada a mediados de este año, fue en principio bien recibida en la Bolsa de Sao Paulo, pero la demora en las definiciones ha generado ciertas dudas en los mercados, que fueron motivo de preocupación para algunas agencias calificadoras de riesgo, como Moody's.

En octubre pasado, en un comunicado a los mercados, Moody's consideró la propuesta del Gobierno brasileño como un “factor de crédito negativo”.

Según la agencia, esos planes “introducen incertidumbre sobre en qué medida el Gobierno soportaría a Eletrobras en momentos de necesidades inesperadas”.

De acuerdo con Moody's, el plan de privatización de Eletrobras crea “distracciones” que pueden “perjudicar otras iniciativas, incluyendo la estrategia de reestructuración de la compañía iniciada en noviembre del año pasado”.

También advirtió de que cualquier impacto en la nota de crédito de la empresa estatal “dependerá de mayores detalles sobre la forma de privatización y probables compradores potenciales, así como un programa específico para la conclusión de la operación”.