Eurodiputada PSOE pide al Gobierno definir modelo social agrario en España

La eurodiputada socialista Iratxe García Pérez pidió hoy al Gobierno español que aproveche la oportunidad que da la nueva PAC para definir un modelo social agrario en España y que las ayudas las reciban realmente quienes producen.

En una entrevista telefónica con EFE, la eurodiputada socialista, miembro de la comisión de Agricultura del Parlamento Europeo (PE), afirmó que no se puede entender que haya personas que, sin estar en activo, sigan recibiendo ayudas agrícolas directas.

“Es fundamental que se defina la figura del agricultor activo como la vinculación de una ayuda a una actividad”, dijo Iratxe García, quien retó al Gobierno a “aprovechar la oportunidad para definir un modelo social agrario”.

Entre los logros del PE en la negociación de la PAC está la elaboración de una “lista negativa de agricultor activo”, es decir, los sectores que actualmente están cobrando ayudas y que, según el PE, no las deberían percibir (aeropuertos, cuarteles militares, instalaciones deportivas).

No obstante, es ahora el ministerio quien tendrá que elaborar la definición final de agricultor activo, teniendo en cuenta las propuestas elaboradas por el PE.

“Que el gobierno aproveche las oportunidades que tiene para definir un modelo social agrario, que dirija las ayudas a los hombres que están trabajando, generando alimentos y actividad en el medio rural y manteniendo el medio rural”, afirmó la eurodiputada.

El Parlamento Europeo vota mañana la Política Agrícola Común (PAC) para el periodo 2014-2020, acordada con los Estados miembros.

Según el PE, la nueva PAC tiene por objetivo asegurar una distribución más equitativa de los fondos entre los Estados miembros y los agricultores.

A juicio de la eurodiputada socialista española, el resultado final de la negociación es “positivo” y, aunque “no sea una PAC perfecta, se han podido parar muchos efectos negativos para la actividad agrícola y ganadera que tenían las propuestas iniciales”.

A última hora el PE ha introducido aspectos presupuestarios que entraban dentro de la PAC, por ejemplo el límite máximo de ayudas por explotación (reducir progresivamente los pagos a las grandes explotaciones a partir de los 150.000 euros).

Según la eurodiputada, el PE ha conseguido también un periodo más amplio en la reducción de ayudas vinculadas a la hectárea, con independencia de la producción (la llamada tarifa plana) para evitar que algunos sectores que a día de hoy tienen pagos altos puedan sufrir pérdidas muy importantes.

Otro asunto a destacar son las ayudas vinculadas a medidas ambientales, una medida muy difícil de aplicar con el clima y las producciones mediterráneas y que, tal y como ha terminado la negociación, “la práctica totalidad de los productores podrán cumplir”.

El presupuesto anual de la PAC, en pagos directos y medidas de mercado (financiación 100 por cien comunitaria) son 43.778 millones de euros. En desarrollo rural (cofinanciado con el Estado y las comunidades autónomas) asciende a 13.991 millones de euros.

“Todas las comunidades autónomas quieren mantener el estatus, pero no se si será posible con un presupuesto tan ajustado”, reconoció la eurodiputada.