El agro de Guatemala cree que el acuerdo agrícola de la OMC fomentará la igualdad

La Cámara del Agro de Guatemala celebró hoy el acuerdo logrado por la Organización Mundial del Comercio (OMC) en Nairobi para eliminar los subsidios a la exportación de productos agrícolas a países en desarrollo, que dará “una oportunidad para competir en condiciones de igualdad”.

“Este es un avance sin precedentes (...) y representa una oportunidad para competir en condiciones de igualdad contra los países desarrollados, que por años han otorgado grandes subsidios a sus agricultores”, manifestó el presidente del ente agrícola, Nils Leporowski.

La OMC alcanzó el pasado 19 de diciembre en Nairobi un acuerdo por el que los países desarrollados eliminarán los subsidios a la exportación de productos agrícolas, como exigían los países en desarrollo, que no obstante deberán acabar también con estas ayudas a largo plazo.

Esta y otras decisiones contenidas en la declaración ministerial están llamadas a impulsar la Ronda de Doha, aunque economías en desarrollo como la India, Cuba y Venezuela temen que el proceso de liberalización comercial iniciado en la capital de Catar no se vea reafirmado de forma contundente y tenga “consecuencias graves” para estos países.

La concesión de ayudas a la exportación de los productos agrarios de los países desarrollados ha limitado hasta ahora la entrada en sus mercados de bienes de las economías en desarrollo, por lo que la supresión de estas ayudas ha sido una de sus demandas históricas en el seno de la OMC.

Según el acuerdo adoptado en materia de exportaciones agrícolas, los países en desarrollo deberán eliminar los subsidios en 2018 y tendrán excepciones hasta 2023.

No obstante, Leporowski apunto que para que tenga efecto esta iniciativa habrá que esperar a que los países cumplan “de manera estricta dicho compromiso”.

La directora ejecutiva de la Cámara del Agro, Carla Caballeros, tildó de “histórico” este pacto, ya que las negociaciones en la OMC habían estado prácticamente estancadas por años.

Este acuerdo entrará en vigencia a partir del 1 de enero de 2016 para los países desarrollados y en el año 2018 para los países en vías de desarrollo.