De Guindos dice que Bankia recibió dinero para salvar a los depositantes, no a los banqueros

El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha dicho hoy que los 20.000 millones de euros que el Estado inyectó en Bankia tenían como objetivo “ayudar a que los depositantes no tuvieran que hacer frente a las pérdidas”, y no “rescatar a ningún banquero”.

Así lo ha asegurado hoy de Guindos en el Congreso de los Diputados, en respuesta a una pregunta del diputado de UPyD Toni Cantó sobre las medidas que ha adoptado el Ejecutivo para garantizar que los accionistas de Bankia puedan recuperar su dinero.

Ahora, ha señalado de Guindos, el FROB, BFA y Bankia analizan el impacto que las indemnizaciones por la salida a bolsa de la entidad puedan tener en sus cuentas, y su potencial reparto entre ambas.

En este sentido, ha explicado que el 63 % de Bankia pertenece a su matriz, BFA, que a su vez es propiedad del FROB, “y el FROB somos todos”, por lo que lo importante ahora es encontrar una solución “justa y realista” para los perjudicados por la salida a bolsa de la entidad, que tuvo lugar en julio de 2011.

El grupo BFA-Bankia “hará frente a todas las sentencias condenatorias que puedan producirse”, ha indicado de Guindos.

Hace unos días de Guindos estimaba en unos 600 millones de euros el coste por las posibles demandas civiles de accionistas minoritarios que participaron en la salida a bolsa de Bankia.

De esta cantidad, unos 375 millones los tendría que asumir la matriz del grupo, BFA, participada íntegramente por el Estado, mientras que el resto, unos 225 millones, lo pondría la propia Bankia.

Y como el 62,5 % de las acciones de Bankia está en manos de BFA, la cabecera del grupo tendrá que hacer frente a otros 141 millones, por lo que al final el potencial impacto de las reclamaciones para los accionistas privados de Bankia se limita a unos 84 millones.

Los 516 millones restantes, hasta llegar a los 600 millones estimados por De Guindos, saldrían de BFA, pero esto no significa que el Estado tenga que volver a inyectar dinero o que aumente el coste para el contribuyente, puesto que la entidad cuenta con recursos propios para hacer frente a estas indemnizaciones.