Trabajadores hondureños piden refundar el Estado por medio de Constituyente

Los trabajadores hondureños conmemoraron hoy su día pidiendo “la refundación del Estado a través de una Constituyente como medio para empezar a transformar la sociedad”.

También pidieron la desmilitarización de la sociedad y del Estado, bajo el argumento que “la seguridad no puede reducirse sólo al resguardo de los intereses de las trasnacionales, de sus socios nacionales, del sistema económico imperante y a reprimir la sociedad”.

Las peticiones de los obreros fueron resumidas en un “manifiesto” leído en Tegucigalpa al cierre de la marcha conmemorativa al “Día Internacional del Trabajo”, que fue recordado en las principales ciudades del país centroamericano.

El manifiesto fija la posición de las tres principales organizaciones obreras: Confederación de Trabajadores de Honduras (CTH), Central General de Trabajadores (CGT), Confederación Unitaria de Trabajadores de Honduras (CUTH) y el Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP).

El FNRP surgió en Honduras tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009 al entonces presidente, Manuel Zelaya, cuando pretendía reformas constitucionales que la ley le impedía.

Zelaya, quien lidera el partido Libertad y Refundación (LIBRE), que también surgió después del golpe de Estado, participó hoy en la marcha de los trabajadores en Tegucigalpa, aunque la mayor parte del recorrido lo hizo subido en la parte trasera de un vehículo desde el que hacía fotos sobre el ambiente de la manifestación.

Sobre el tema de la reelección presidencial, a lo que aspira Zelaya, dijo que será “el pueblo quien lo decidirá”.

El manifiesto de los trabajadores recoge 20 peticiones, entre las que sobresalen además “el combate contra toda forma de impunidad y corrupción” y “el cumplimiento de los convenios de la Organización Internacional del Trabajo referidos a la libertad sindical, contratación colectiva, derecho a huelga y seguridad social”.

También se pronunciaron por el mejoramiento de las condiciones de vida del pueblo que incluya la elevación de los salarios y el fortalecimiento del sector social de la economía, y el acceso al empleo permanente y bien remunerado y a los servicios públicos.

El Gobierno que preside Juan Orlando Hernández también fue blanco de las críticas de los trabajadores, quienes además indicaron que los cambios que actualmente exigen “no son los que irresponsablemente impone el poder oligárquico a través del Congreso Nacional” (Parlamento).

Según los trabajadores, en el Parlamento “se legisla para cambiar la correlación de fuerzas entre el Estado y el sector capitalista privado”.

“Es decir, nuestros legisladores se afanan en trasladar a manos privadas los bienes del Estado, cambio, que nos hace más atrasados y más dependientes”, añade el pronunciamiento de los trabajadores.

El diputado Rafael Alegría, del partido LIBRE, dijo a Efe que “la clase trabajadora hondureña está golpeada por el actual sistema neoliberal y la represión del gobierno”.

El presidente de la CUTH, José Luis Baquedano, indicó a Acan-Efe que la clase obrera exige que “la canasta básica esté accesible al pueblo hondureño”.

Los manifestantes portaban pancartas con mensajes alusivos a la clase trabajadora y exigiendo conquistas.

“Por una seguridad social pública inclusiva, sostenible y constitucional”, era uno de los mensajes de las centrales obreras en una manta grande.

En un ataúd los trabajadores expresaron su rechazo al pago de la deuda externa del país, que supera los 5.000 millones de dólares, mientras que en otro mensaje resaltaron: “La reelección no es solución en esta nación”.