Tráfico mercancías con Marruecos reabre mañana tras más de un mes paralizado

El tráfico de mercancías entre Ceuta y Marruecos se retomará mañana tras haber permanecido interrumpido desde finales de septiembre como consecuencia de la protesta de los comerciantes de cerrar sus negocios por razones de seguridad y de la imposición de una tasa municipal, que finalmente no se ha cobrado.

Según ha informado en un comunicado la Delegación del Gobierno, mañana está prevista la reapertura del paso Tarajal 2, que ha permanecido cerrado las últimas semanas por motivos de seguridad, a causa de la decisión de los empresarios de los polígonos de la frontera de impedir el acceso a sus instalaciones de los porteadores marroquíes que cargan los bultos de mercancías sobre sus espaldas.

La Delegación del Gobierno ha autorizado la prestación en el polígono del Tarajal de los servicios de vigilancia y protección contenidos en el “Plan de Seguridad”.

Dicha autorización se extiende a la apertura de la denominada “puerta norte”, en horarios no coincidentes con Tarajal 2, con garantía por parte de la seguridad privada de que la salida de personas por esa puerta se circunscriba al “régimen de viajeros” contemplado en la normativa aduanera.

El objetivo de esta medida es garantizar la seguridad, integridad física y libre circulación de las personas por el interior de los polígonos, independientemente del tipo de mercancía que transporten los porteadores.

En cuanto a los polígonos del Tarajal Fase I, La Chimenea y Alborán, la Delegación del Gobierno ha ordenado la incoación de un expediente sancionador por el incumplimiento de una orden relativa a la elaboración de un plan de seguridad y a la designación de un coordinador de seguridad.

Se propone además una sanción de 100.000 euros a cada comunidad de propietarios o la clausura de seis meses y un día de los establecimientos que conforman dichos polígonos.

Las más de 200 naves comerciales situadas en el Polígono del Tarajal han permanecido cerradas más de un mes también por la decisión del Gobierno ceutí de poner en marcha una tasa para cubrir el sobrecoste de los servicios en el entorno de la frontera del Tarajal, como consecuencia del trasiego de bultos de mercancías con Marruecos.

La tasa económica, que finalmente no se va a cobrar, iba a estar destinada a cubrir los servicios extraordinarios que la Ciudad realiza y que están derivados del hecho fronterizo, sobre todo en materia de limpieza del entorno por la acumulación de vertidos y cartones.