La piratería en Somalia ha desaparecido pero la vigilancia debe seguir, según la Armada

El comandante del “Rayo”, el último buque de la Armada que ha participado en Somalia en la operación Atalanta, cree que “la piratería, tal y como se ha entendido en los últimos años, es muy posible que haya desaparecido” de esas aguas, pero podría resurgir si se descuida la vigilancia.

“La piratería está fracturada, pero no está rota”, ha señalado Rafael Samaniego, comandante de ese buque de acción marítima de la Armada a su regreso a Las Palmas de Gran Canaria, tras completar una misión de control del entorno de Somalia enmarcada en la operación internacional de protección del tráfico marítimo en la zona.

Esa misión ha mantenido alejados durante seis meses de su puerto base en la capital grancanaria a los tripulantes del “Rayo”, que, entre otras tareas, se han ocupado de “recabar información acerca del estado de las células piratas en zonas en las que tradicionalmente han existido”, ha destacado Samaniego.

“Determinar sus infraestructuras, sus medios económicos y la razón de su aparente falta de actividad”, buscando datos “a través del trato con navegantes, con personas influyentes y con líderes locales”, han sido los fundamentos de esa faceta de su trabajo, ha añadido este oficial de la Armada.

De los resultados de esas labores, ha dicho que se ha extraído la conclusión de que el fenómeno de piratería que dio lugar a la operación “Atalanta”, iniciada ante la alarma que causaron años atrás frecuentes episodios de secuestros de buques y tripulantes, podría haber desaparecido, si bien ha matizado que “nunca se debe descartar que vuelva a aparecer en otras formas”.

“Las zonas en las que hemos estado son zonas muy complicadas, donde los criminales, que los hay, son auténticos gángsters que un día pueden cambiar de nuevo su modelo económico y dedicarse a la piratería otra vez”, ha relatado, insistiendo en que hay que tratar de evitar que esa forma de delincuencia.

Samaniego ha querido aclarar, en todo caso, que los datos recabados por los integrantes de su expedición son favorables y apuntan incluso a que tal vez la operación “Atalanta” podría darse por finalizada en un futuro próximo.

Y ha subrayado que esos datos se han obtenido en el marco de una misión que ha calificado de “éxito”, no solo por la información recabada, que es “muy valiosa”, sino también porque durante la estancia del “Rayo” en la zona no se ha producido ningún nuevo ataque pirata y por el balance positivo del trabajo desarrollado por el buque y sus tripulantes.

Ya que el “Rayo” “ha funcionado correctamente y sin sufrir ningún problema ni averías y los 87 militares embarcados en él para esta misión, entre dotación, personal de apoyo de un helicóptero que iba a bordo e infantes de marina del Equipo Operativo de Seguridad y de la Fuerza de Guerra Naval Especial de la Armada, ha hecho su trabajo de manera satisfactoria, ha afirmado.