La voladura de la torre refrigeración de la térmica de Puertollano tendrá lugar en pocas semanas

La demolición de la torre de refrigeración de la central térmica de Puertollano propiedad de Viesgo Generación, que alcanza los 122,5 metros de altura, tendrá lugar a finales de este mes o comienzos del próximo, según han informado a Efe fuentes de la empresa.

La voladura de la torre, que tendrá un presupuesto de 373.900 euros, se hará en una fase única mediante “cargas muy pequeñas de explosivos que tienen por objetivo causar el colapso de puntos críticos de los elementos estructurales que harán caer la torre en tres o cuatro segundos”, han añadido.

La torre mide 122,5 metros de altura; de anchura tiene 86,90 metros en su parte máxima y 48 hacia mitad de la torre, y la corona tiene un diámetro de 54,5 metros.

Está formada de una lámina delgada de hormigón armado con un espesor de entre 14 y 18 centímetros en la parte superior, mientras que la base de la lámina se ensancha hasta los 45 centímetros en los seis metros inferiores de la lámina, que reposa sobre 88 pilares inclinados, de 70 centímetros de diámetro y 7 metros de altura cada uno.

El entorno afectado por la voladura “no se extenderá más allá de un kilómetro”, si bien la zona de exclusión (un área acordonada en la que sólo podrá estar el personal autorizado) será de 300 metros alrededor de la torre.

Las instalaciones y equipos de superficie que se encuentren a una distancia de hasta diez metros de la base de la torre serán desmontados temporalmente o protegidos con materiales de distinta naturaleza, según los casos.

Y el mismo tipo de medidas de protección se tomará con los árboles y plantas del entorno inmediato.

La voladura de esta torre de refrigeración es “solo una de las acciones comprendidas en el proceso de desmantelamiento, que abarcará, aproximadamente, hasta mediados de 2016”, han agregado las fuentes.

El objetivo es “poner la central en seguridad y cumplir con todos los requisitos establecidos en el plan de cierre”.

Los trabajos de desmantelamiento de la central están a cargo de la empresa española Control Demeter, que tiene una “larga” trayectoria en esta actividad y, por ejemplo, se ha encargado de la demolición de la fábrica Campofrío en Burgos o del antiguo estadio de fútbol del Espanyol en Barcelona.

En cuanto al futuro de la central, las mismas fuentes han señalado que “lo más inmediato” es completar el desmantelamiento de la central y “una vez puesta en seguridad, se tomará una decisión”, para la que hay varias ofertas, han añadido.

La central térmica de Puertollano fue construida y puesta en marcha por la empresa Sevillana de Electricidad en 1972.

En 1994 pasó a manos de Endesa, que en 2002 la vendió al grupo italiano ENEL y, a su vez, a la multinacional alemana EON seis años después, cuando la central tenía en plantilla de 72 trabajadores.

Finalmente, esta central de 220 megavatios de potencia ubicada en la carretera de Mestanza dejó de funcionar en octubre de 2013, un año antes de que la mayoría de los activos de EON en España pasaran a denominarse Viesgo Generación tras su venta a los fondos Macquarie European Infrastructure Fund 4 y Wren House Infrastructure.