Diputación Cáceres crea un ‘FLA municipal’, 10 millones en préstamos a interés cero para ayuntamientos
La Diputación de Cáceres ha presentado el Fondo Financiero de Anticipos Reintegrables a Entidades Locales, dotado con 10 millones de euros, con el que otorgará préstamos a interés cero a los ayuntamientos, “convirtiéndose así en el banco de los consistorios”.
Se trata de una iniciativa “novedosa” en la provincia, según ha destacado durante el acto la presidenta de la institución, Rosario Cordero, en el que estuvo acompañada del vicepresidente segundo y diputado de Economía y Hacienda, Alfonso Beltrán.
El objetivo de este fondo consiste en la concesión de préstamos reintegrables, a interés cero, a las entidades locales de la provincia, que de este modo contarán con una herramienta “para resolver sus tensiones de tesorería, así como para afrontar la posibilidad de acometer inversiones en beneficio de la prestación de los servicios municipales”.
Está dotado con 10 millones y al tener un interés cero, “el beneficio de la ausencia de intereses se quedará en los pueblos de la provincia”, ha precisado Cordero.
Se han diseñado cuatro líneas de actuación, una de ellas de anticipos reintegrables destinada al saneamiento del remanente de Tesorería para gastos generales y para el pago de sentencias firmes en los tribunales.
El plazo máximo de reintegro es de 30 mensualidades o antes de la renovación de la corporación.
La segunda línea se destina a financiar inversiones con un plazo de devolución de 120 meses a partir del 1 de enero de 2017.
Refinanciar préstamos anteriores
La tercera se dedica a la refinanciación de operaciones de crédito a largo plazo realizadas por la entidad local y a la financiación de pagos de deudas con la Seguridad Social, con un plazo de devolución de 120 mensualidades.
Por último, la cuarta línea la constituyen los anticipos reintegrables para atender necesidades transitorias de Tesorería, con un plazo de reintegro inferior al año.
Según la Diputación, la reforma local de 2013 y los últimos presupuestos estatales han “cercenado” a las entidades locales la posibilidad de concertar operaciones bancarias de crédito para la financiación de inversiones y servicios.
A ello ha sumado el Plan de Pago a Proveedores, que ha supuesto para los municipios el pago de un tipo de interés medio de entre el 5 y el 6 por ciento para la devolución de las cuantías, e incluso retenciones en la participación de los impuestos del Estado.
A todo ello, según Cordero, se debe sumar las limitaciones que se establecen respecto a la regla de gasto, donde se da la “paradoja” de que las entidades locales con remanente de tesorería “no pueden destinarlo a los gastos que exigen los vecinos”.
