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La Junta alerta de una presunta estafa en dos webs extremeñas de productos electrónicos

Una de las webs con los productos que oferta

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La Junta de Extremadura y la Policía Nacional han solicitado a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura la suspensión cautelar y cierre de dos webs de sendas empresas extremeñas del mismo propietario, y de Campanario (Badajoz), por si hubiera un presunto delito de estafa continuada, ya que el Instituto regional de Consumo acumula 200 reclamaciones de otros tantos usuarios.

Las webs según ha alertado el consejero de Sanidad y Política Social, José María Vergeles, son mytelecom y nanoprecios, que en este momento siguen activas.

El importe de las reclamaciones de los clientes suma 60.000 euros y las empresas “no han colaborado en absoluto” con la Junta a la hora de ser inspeccionadas y controladas, o de admitir una mediación con los clientes.

Según el consejero la queja de los compradores es que pagan la mercancía pero no la reciben, y cuando contactan para reclamar el envío del producto, o la devolución del dinero, “la empresa usa maniobras de dilación para no hacer una cosa ni la otra”

Las ventas se centran principalmente en televisores, teléfonos móviles y tablets, y el importe medio de las reclamaciones es de 400 euros, aunque algunas llegan a los 1.000.

Quejas desde el principio

Estos negocios abrieron en 2014 como tiendas de venta por Internet, y en 2016 como tienda física en Campanario; como había quejas de clientes los servicios de inspección y consumo de la Junta realizaron varias visitas, intentos de mediación entre la firma y los usuarios, pero en las últimas visitas el negocio había cerrado sin respuesta a Consumo autonómico, por lo que se le abrieron varios expedientes administrativos por falta grave o muy grave.

En colaboración con las unidades de delitos tecnológicos de Policía Nacional y Guardia Civil, ha seguido explicando el consejero Vergeles, se dio comunicación a Fiscalía por si hubiera un presunto delito de estafa continuada, remitida al Juzgado de Instrucción número 2 de Villanueva de la Serena.

Después, en unión de Policía Nacional, la Junta ha pedido a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura, para evitar más perjuicios a los consumidores, el cierre preventivo y cautelar de las dos webs.

Internet está llena, añade Vergeles, de foros con quejas de clientes. En el Instituto de Consumo de Extremadura hay 200 reclamaciones presentadas, de personas que han comprado un artículo pero ni lo han recibido, ni les han devuelto el dinero. El número de problemas es “el mayor que haya llegado nunca a la Junta respecto a una empresa”.

Las 200 reclamaciones proceden de toda España, han aumentado en los últimos meses, pero posiblemente haya muchas más presentadas en otros servicios de consumo.

Vergeles, consejero competente en materia de consumo, ha reprochado a las dos empresas su “absoluta falta de respuesta y colaboración” en sus funciones de inspección, control y mediación con los usuarios. Al cliente que reclama a la empresa “generalmente se le responde con maniobras de dilación”.

El administrador único de las dos firmas, un joven de 29 años, ha sido detenido y llevado a declarar varias veces pero siempre fue puesto en libertad.

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