Apoyo unánime de la Asamblea para que la normativa de seguridad de la UE respete la saca tradicional del corcho
El problema reside en la imposibilidad de aplicar las medidas de seguridad laboral que establece la ley, análogas a las del sector de la construcción. Advierten que conlleva un gran perjuicio económico en el caso de la saca tradicional del corcho, un sector muy importante para Extremadura.
Así el sector demanda que las labores de saca se realicen de la forma tradicional al no disponer de medios que sean eficaces para cumplir con la normativa de seguridad y, por tanto, evitar las sanciones en caso de accidente.
La Asamblea de Extremadura ha aprobado por unanimidad pedir al gobierno extremeño que abra un proceso de diálogo con el de España y la Unión Europea para que se permitan las labores de la saca del corcho, dado el valor medioambiental, singularidad y excepcionalidad de la dehesa.
La propuesta ha sido presentada por el Grupo Popular, cuya portavoz, María Auxiliadora Correa, ha acusado a la Junta de “paralizar” este año la campaña como única medida contemplada para garantizar la seguridad de los trabajadores, como establece la normativa de prevención de riesgos laborales.
Sin embargo, el portavoz del PSOE, José Antonio González, ha rechazado que la Junta de Extremadura haya paralizado la campaña y ha criticado las iniciativas llevadas a cabo por el Gobierno de José Antonio Monago en esta cuestión, que no han solucionado el problema. Además, ha anunciado que ya se ha trasladado esta cuestión a la Comisión Nacional de Seguridad y Salud para su debate, además de que se están buscando opciones técnicas que permitan desarrollar este trabajo con garantías.
La problemática
Al gremio se le aplica la normativa perteneciente al sector de la construcción, de ámbito nacional, lo que hace que no dispongan de un dispositivo anticaída que sea utilizable y que no entrañe riesgos. En una pared se puede poner un andamio, pero clavar un arnés en un árbol es imposible.
La asociación ya trabaja con la Junta en la elaboración de un informe científico-técnico que exponga las particularidades del sector, y en el que participan también el Instituto del Corcho, la Madera y el Carbón Vegetal (IPROCOR), la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX), Inspección de Trabajo y sindicatos.
