Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Extremadura exporta su modelo de gestión de geoparque a Nicaragua

Geoparque Villuercas / Turismo de Extremadura

Jesús Conde

Fue una carrera de fondo, pero Villuercas-Ibores-Jara entró en el selecto club de la red mundial de geoparques por su interés científico y natural. Por albergar los terrenos más antiguos de la Península Ibérica y regalar al visitante sus bellos paisajes y arquitectura. También por ser ejemplo de buenas prácticas de desarrollo rural. Es decir, por mantener el equilibrio entre la naturaleza y el hombre.

Ese es el modelo que ahora exporta Extremadura a Nicaragua de la mano de la cooperación al desarrollo. De buena parte de esa tarea se ha encargado Felcode, el Fondo Extremeño Local de Cooperación para el Desarrollo, que ha realizado varias actividades centradas en reforzar la candidatura nicaragüense de Geoparque Río Coco (al norte del país, en la región de Madriz). El proyecto está a punto de ser presentado ante la UNESCO.

En este proceso Felcode ha invitado a expertos y técnicos del país centroamericano a conocer ‘in situ’ la estructura de gestión y los resultados obtenidos para el desarrollo social y económico de la comarca cacereña. A ello se suma el envío de dos técnicas expertas en turismo y arqueología, que se han sumado al equipo que ultima la candidatura.

Una de ellas ha sido la arqueóloga Yolanda Pereira, que ha trabajado codo con codo con la Alcaldía de Somoto en el diseño y redacción de los textos para el panel informativo que será colocado en el yacimiento de Piedras Pintadas, en Icalupe. Además ha puesto en práctica las pautas para la ejecución de un programa museológico que se adaptará a las necesidades de los diferentes museos de la municipalidad de Somoto.

También se ha desplazado a Nicaragua María Dolores Vicho, técnica en turismo, que se incorporó al municipio de Las Sabanas --a unos 20 Kilómetros de Somoto-- a través de la UCOM, la Unidad de Concertación y Cooperación Municipalista.

Su trabajo ha consistido en la redacción de un manual de gestión para la creación de una oficina de información turística. Además ha colaborado en la realización de planes de negocio que se están llevando a cabo con los distintos productores de la zona, para que sus actividades se conviertan en un atractivo turístico más.

Ambas viajaron a terreno a través del programa ‘Voluntarios Expertos’ que pone en marcha Felcode, y que consiste en el envío de personal técnico, con amplia experiencia y capacidades, para desarrollar o continuar un trabajo.

José Antonio Murillo, de Felcode, indica que son proyectos centrados en la transferencia de conocimiento, de modo que es una cooperación técnica. Son personas encargadas de aportar su experiencia en gestión a municipios, mancomunidades y departamentos.

Es un trabajo que desarrolla Felcode en Nicaragua y en otros siete países de América Latina. En concreto Bolivia, Chile, Ecuador, El Salvador, Paraguay, República Dominicana y Uruguay.

Cooperantes en el Geoparque

Dolores Vicho aterrizó en Las Sabanas, un municipio situado en plena montaña y gran potencial turístico. Alberga espacios salvajes, en el corazón de la reserva natural ‘La Patasta’, con espacios de gran atractivo como cascadas, el Jardín del Edén o la Laguna de la Bruja. Allí se integró al equipo de la alcaldía del municipio para mostrarles la labor de gestión turística que ella desarrolla en Extremadura.

“Es indudable que la zona cuenta con grandes atractivos desde el punto de vista del turismo, con grandes recursos medioambientales o gastronómicos. El geoparque puede ser un gran impulso económico para todos los municipios del proyecto”.

El concepto de geoparque también cobra sentido si implica y tiene en cuenta a los habitantes. Aquellos que han conservado el espacio a lo largo de milenios. Y de eso también se ha encargado esta extremeña, que ha reforzado los planes de negocio que se plantean a los productores de fresas y patata.

El objetivo, mostrarles cómo sacar mayor beneficio a sus productos, de modo que sus cultivos, el proceso de recolección en la montaña o su transformación, sean un atractivo más para el turista.

Como vivencia personal destaca que “es gratificante ver cómo, a través de tu experiencia, puedes ayudar con pequeñas aportaciones a los municipios. También la oportunidad de ver cómo ellos reciben todo”. “Al final resulta algo recíproco, tanto de nosotros hacia ellos, como de ellos hacia nosotros”.

No es su primera experiencia, ya que Felcode le ha dado la oportunidad de desarrollar otros proyectos turísticos en otras zonas de Latinoamérica. “Cada proyecto es un reto personal y cuando vuelves es muy gratificante ver y comprobar cómo, a lo largo del tiempo y en el futuro, todas esas 'semillitas' que tu sembraste en van dando sus frutos, hasta verse que se puede vivir de ese desarrollo turístico”.

Es complicado hacer similitudes entre el caso del geoparque Villuercas con el caso nicaragüense porque son realidades diferentes. Se trata de territorios con niveles de desarrollo diferentes según explica la experta. Comenta no obstante que una gran similitud puede ser el desarrollo turístico que ya trabaja a nivel nacional Nicaragua, y que ha sido reforzado a través del voluntariado y cooperación.

La arqueología y el geoparque

La otra de las experta en terreno ha sido la extremeña Yolanda Pereira. Relata que desde el punto de vista arqueológico la región de Madriz es una zona muy rica, y aún por estudiar. “Se puede observar a través de sus manifestaciones la interacción del hombre con la naturaleza: cómo el ámbito social y el mundo de las creencias están fuertemente implicados”.

Su aportación ha consistido en dar continuidad a los trabajos de sus tres colegas anteriores, “que con los escasos recursos realizaron un trabajo encomiable”.

Su experiencia personal ha sido muy buena. “La rutina laboral te hace olvidar lo gratificante que es mi profesión, y el trabajo que me han permitido realizar en Somoto lo ha sido. A nivel personal supone conocer otra cultura, estar en contacto día a día con personas que tienen una filosofía de vida diferente me ha enriquecido. He tenido la suerte de conocer un país de gente afable, con un patrimonio cultural, natural y antropológico muy rico”.

En cuanto a las similitudes con el geoparque Villuercas, coincide en que es complejo hacer comparativas porque las realidades son totalmente diferentes. “La arqueología nicaragüense adolece de personal cualificado en la materia. Actualmente el número de arqueólogos con los que se cuenta para todo el país no llega al centenar. Para el caso del departamento de Madriz, integrado por cinco municipios, dos profesionales son los encargados de realizar toda la carta arqueológica, a lo que se une la falta de medios”.

En cuanto a los museos, comenta que si el número de arqueólogos es insuficiente, el personal con conocimientos en museología es casi inexistente. De hecho uno de los principales museos del país está dirigido por extranjeros. “Nicaragua es un país con un rico patrimonio arqueológico, cuyos trabajos de investigación se realizan en el 90 por ciento de los casos por personal extranjero”.

Valora la profesionalidad del personal que realiza este trabajo en el país centroamericano. “Más encomiable si cabe, por las condiciones en las que lo realizan. Cuando la administración no puede ejecutar los proyectos por falta de recursos económicos, en ocasiones los arqueólogos lo continúan de forma altruista”.

El trabajo de Felcode

La filosofía del programa Voluntarios Expertos es la asistencia técnica de estos profesionales en terreno, para estimular la participación directa de los socios locales de Felcode. Capacitarlos y fomentar el propio 'empoderamiento' de las organizaciones con las que trabaja en los diferentes países.

En el caso de Nicaragua comenzaron a trabajar con este país latinoamericano en el año 2012, de la mano de la UCOM, Unidad de Concertación y Cooperación Municipalista, que integra a municipios del departamento de Madriz.

Se buscan socios intermediarios a la hora de desarrollar los trabajos. El objetivo es que el trabajo tenga un impacto y una continuidad en terreno, con independencia de que haya un cambio político en los lugares a los que llegan los proyectos, apunta el técnico José Antonio Murillo de Felcode.

Más de 200 técnicos en terreno

‘Voluntarios Expertos’ ha cumplido este año 13 ediciones, por las que han pasado hasta el momento más de 200 técnicos y técnicas de Extremadura. Además de capacitar a los proyectos en terreno, los voluntarios y voluntarias adquieren el compromiso de sensibilizar a la población extremeña sobre la realidad de los países del Sur tomando conciencia de la realidad social y económica de países empobrecidos.

“Concienciando sobre la necesidad de cambiar determinadas políticas y conductas sociales y económicas que realizamos desde los países del Norte, y que sin duda contribuyen a generar y mantener estas situaciones de desigualdad”, según destaca Felcode.

La estancia de las personas voluntarias suele coincidir con su mes de vacaciones estival. Contribuyen de manera altruista a fortalecer el mundo local en los países iberoamericanos en los que FELCODE viene trabajando.

Este programa es posible gracias al apoyo de todos sus socios –las dos Diputaciones Provinciales, 2 mancomunidades y 192 ayuntamientos extremeños–, que funciona junto con diversas instituciones y 'contrapartes' locales.

Su objetivo primordial, contribuir a fortalecer el mundo local en los países iberoamericanos en los que FELCODE viene trabajando. También facilita a técnicos extremeños su acceso al mundo de la cooperación internacional al desarrollo.

Etiquetas
stats