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“La reforma local también quiere evitar que se lleven a cabo políticas alternativas”

Miguel Pardo

Francisco García, alcalde de Allariz y vicepresidente de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), le recuerda a los diputados gallegos del PP que “tendrán que aclarar porque van en contra” del rechazo unánime a la ley que sus alcaldes acordaron con el resto de municipios de la comunidad. Además, el regidor del BNG asegura que la norma “se ceba” especialmente con Galicia y que forma parte de una estrategia más amplia “enmarcada dentro del rescate al Estado y de las condiciones impuestas por Europa”.

La ley de la reforma local sigue adelante su trámite en el Congreso a pesar del rechazo masivo de ayuntamientos y oposición...

Es lamentable que el PP esté modificando sustancialmente el Estado de Bienestar con medidas que van a afectar de una manera muy importante a los ciudadanos. Lo hace sin consenso y forma parte de una política sin complejos que tiene su raíz en la modificación constitucional que impulsó el gobierno del PSOE y en la ley de estabilidad presupuestaria posterior con todos los procesos de limitación de gasto público que provocan. Trasladan su filosofía al ámbito municipal con demagogia, reduciendo el número de concejales, pero sobre todo a través de una modificación muy profunda del régimen local en la que ponen por encima de todo la estabilidad presupuestaria, incluso cargándose servicios públicos fundamentales, sin hacer nada por uno correcto financiación de los ayuntamientos y cebándose especialmente en Galicia.

¿Por qué especialmente con Galicia?

Aquí en Galicia esa financiación es especialmente injusta porque no tiene en cuenta criterios tan objetivos como la dispersión de la población o el número de núcleos habitados, lo que es fundamental a la hora de prestar bien los servicios.

“La reforma local sigue el modelo del que el PP hace en sanidad, educación o mercado laboral”

¿Es tan negativa esta reforma local para los ayuntamientos?

Esta reforma local afecta a las competencias municipales y la autonomía local, imponiendo unas políticas que van a limitar la capacidad de los ayuntamientos y afondando en la centralización y en una administración vertical donde el papel del Ministerio de Hacienda, a través de secretarios e interventores, pasa a ser fundamental mediante informes y un control estricto, rompiendo con cualquier tipo de iniciativa propia. Además, se refuerzan unas instituciones como las diputaciones y se invaden competencias recogidas en el Estatuto. Antes, la competencia del Estado era establecer las bases, pero ahora entran de lleno en una regulación que elimina cualquier posibilidad de que la Xunta pueda fijar la forma de asentamiento en el territorio tan peculiar que tenemos los gallegos. En definitiva, esta reforma no es nada más y nada menos que el que el PP está haciendo en otros ámbitos como la sanidad, la educación o a través de la reforma laboral.

¿Atacar los servicios públicos?

Se incluye en un conjunto de reformas de calado que han modificado la legislación de derechos y servicios públicos y donde se imponen perjuicios. Se parte de la idea de que los ayuntamientos pequeños van a prestar servicios mucho más caros que los grandes, cuando el gran endeudamiento está en las grandes ciudades y además gobernadas mayoritariamente por el PP, como en el caso de Madrid o Valencia. Y eso que tienen una financiación mucho mejor y beneficiosa que la de los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes. Además de invadir las competencias gallegas, no se ajusta para nada a la realidad de Galicia y le abre una vía de negocio a las grandes corporaciones para la privatización de servicios a partir de las diputaciones. Para la mayoría de los ayuntamientos gallegos creará una situación tremendamente negativa que ahondará en los problemas del rural en el país y que convertirá muchos ciudadanos en ciudadanos de segunda.

“Medidas como esta reforma se enmarcan dentro del rescate al Estado y de las condiciones impuestas por Europa”

Pero a pesar de todo, la ley sigue adelante.

Las medidas se enmarcan dentro del rescate al Estado español y de las condiciones impuestas por Europa que en otros países, como en Portugal, provocaron importantes cambios en la estructura local. La razón de esta reforma local es esta e instaurar menos autonomía, menos democracia y quitarle servicios a la ciudadanía.

Los alcaldes del PP en Galicia rechazan la reforma local, pero el PP no enmienda la ley en Madrid y emite un comunicado a favor de la ley en nombre de todos sus regidores...

Los argumentos en contra de esta ley expresados por muchas fuerzas políticas fueron muy claros, así como los que unánimemente trasladó la Fegamp. Y es aquí donde hay una clara contradicción porque una buena parte del cuerpo social e institucional del PP no acepta esta reforma, esta supresión de competencias municipales, ni el refuerzo de las diputaciones ni esta imposición de medidas como el costo efectivo de los servicios como regla absoluta y que provocará que los ciudadanos dejen de recibir muchos servicios fundamentales. Ahora serán suprimidos de facto por esta legislación.

“Los diputados gallegos del PP tendrán que aclarar porque van en contra del que sus alcaldes acuerdan en la Fegamp”

¿Pero esta posición del PP a nivel estatal causará un conflicto en Galicia? ¿Y en la Fegamp?

Eso lo tendrá que aclarar el PP y los diputados y senadores elegidos por Galicia a la hora de la votación de este texto en el Congreso y en el Senado. Hay una consideración prácticamente unánime en contra de la reforma por invadir competencias propias de Galicia, por reducir la autonomía municipal, por no solucionar el grave problema de financiación que tenemos los ayuntamientos... Son datos de peso y esperamos que la posición de los diputados y senadores del PP gallegos sea congruente con la postura mostrada en la Fegamp, que además le fue trasladada a las diferentes formaciones con representación gallega en Madrid.

¿Pero hay un apoyo mayoritario a la reforma en el PP?

Este texto, excepto Montoro, presidentes de las diputaciones provinciales y esos alcaldes que salieron en la foto en Madrid, no cuenta con ningún tipo de apoyo. El PP, igual que en otros ámbitos como la reforma laboral, el copago, la reforma laboral o la Lomce, puede que haga caso omiso de estas voces críticas, pero es inaudito que se haga una reforma como esta sin la anuencia de los alcaldes y sin una seguridad incluso jurídica de permanencia.

“El texto, excepto Montoro y algún alcalde que fue a hacer la foto a Madrid, no cuenta con ningún apoyo; pero el PP no hace caso”

¿Cómo afectaría esta reforma local a un ayuntamiento como Allariz?

No se modifica para nada la financiación que los ayuntamientos gallegos debían recibir. Recibimos por habitante mucho menos del que nos correspondería y además no se tienen en cuenta variables que encarecen la prestación de muchos servicios. No es el incluso prestar un servicio de recogida de basura en un ayuntamiento de Castilla o Extremadura, con un único núcleo de población, que hacerlo en más de 90 núcleos como tiene Allariz. Gestión del agua, saneamiento, locales sociales... Además, los servicios que quedan establecidos como servicios mínimos sonido ridículos para los que hoy en día está atendiendo un ayuntamiento como el nuestro. De lo que nosotros estamos haciendo ahora, con esta reforma no habría instalaciones deportivas, ni servicios sociales, ni promoción económica, ni oficina de información y Turismo, ni casas de la juventud... Queda en nada el capital social básico y la calidad de vida de los ciudadanos. Estos servicios podrán ser cuestionados en cualquier momento porque no son servicios mínimos obligatorios pero, eso sí, los obligatorios se ofrece la que puedan ser gestionados por la Diputación y que puedan ser negocio de grandes operadoras, como por ejemplo en el caso del tratamiento de residuos o del saneamiento.

“Con esta reforma, queda en nada el capital social básico y la calidad de vida de los ciudadanos”

Otra de la queja recurrente de los alcaldes es la pérdida de iniciativa política en los ayuntamientos.

Además, nosotros estamos dispuestos a asumir el copago farmacéutico o los comedores escolares cuando la Xunta los deja. Y lo podemos hacer en base a un artículo de la ley de bases de régimen local que nos permitía poner en marcha actividades complementarias de otras administraciones. Ahora eso es suprimido, pero no en el caso de las diputaciones provinciales, que son reforzadas y que podrán hacer lo que quieran en base a los informes diera interventor que impone el Gobierno, por lo que hay un límite absoluto a poner en marcha cualquier política alternativa a la diseñada en altas instancias.

Visto el rechazo general de la reforma y los graves problemas que provocaría, ¿confía en que el PP dé marcha atrás?

Mucho me temo que no porque es un compromiso ante la UE que tiene que ver con el rescate para salvar el sector financiero. Además, tiene una orientación clara de favorecer al sector personal y destila una fobia tremenda a la iniciativa pública, todo fruto de un sesgo ideológico absoluto. Temo que esto va a primar y que se va a hacer el incluso que en sanidad, educación o en el mercado laboral. Quieren evitar a toda costa que se lleven a cabo políticas alternativas.

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