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The Organised Thieft, un nombre muy molón para un ‘simulador de cacos’

The Organised Thieft

Daniel Moreno

A día de hoy videojuegos hay muchos de todos los tipos y colores gracias en gran medida a las aportaciones realizadas por los desarrolladores indies, quienes no temen innovar con ciertas mecánicas o propuestas argumentales completamente impensables para una gran editora.

De esta forma hemos visto renacer géneros como los survival horrors, han vuelto a la vida los títulos de corte retro, se han impulsado los de puzles e incluso hemos disfrutado con algunos títulos sin objetivos, ni historia ni nada de nada. También hemos sido de todo gracias al éxito de los simuladores de cosas, como por ejemplo simulador de cabra, simulador de oso, simulador de fumador, simulador de periodista de videojuegos, simulador de piedra, simulador de gato, simulador de rebanada de pan bimbo… Y sí, aunque parezca mentira entre toda esta buena ristra de propuestas más o menos disparatadas aún hay hueco para el ‘simulador de caco’.

Así nace The Organised Thieft, título que acaba de iniciar una campaña en Kickstarter con la que sus responsables esperan obtener financiación para su desarrollo. Y en qué consiste, os preguntaréis. Pues básicamente en asaltar casas y saquearlas a conciencia haciéndonos con los bienes más valiosos, como joyería, smartphones, tabletas, ordenadores portátiles, etc.

Sin embargo no será tarea fácil, ya que The Organised Thieft busca el realismo, busca que nos sintamos cacos de los de verdad, de los que notan con cada acción el aliento de la poli sobre su nuca. Por lo que tendremos que interactuar con multitud de objetos como puertas, luces y alarmas además de ser capaces de escondernos hábilmente si a los propietarios les da por volver a casa sin avisar.

Así que ya sabéis, si veis que la crisis puede con vosotros y que no os queda otra que dedicaros profesionalmente al noble arte del robo, no dudéis en echarle antes un vistazo a este juego como entrenamiento virtual, no vaya a ser que por manazas acabéis haciendo compañía a Bárcenas y cía.

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