El primer proyecto de microteatro en La Palma recibe el apoyo del público
La compañía palmera Cruzado Mágico estrenó el pasado 26 de agosto la primera obra de microteatro en la Isla: Sin pelos en la lengua, informa en una nota de prensa. El resultado, añade, ha sido “un lleno total, durante tres viernes consecutivos, en la peluquería de Carmen Asensio de Los Llanos de Aridane, el inusitado espacio teatral que María J. Batista, Mercedes Barreto y Diego Santos eligieron para su nueva propuesta”.
Explica que “piezas teatrales breves, un espacio pequeño y el público a menos de dos metros de los actores es la fórmula básica del microteatro”. En la nota se apunta que “cuando María J. Batista descubrió esta nueva forma de interpelar al espectador tan íntimamente, decidió que quería traer ese teatro de petit comité a La Palma. Su determinación y la de sus compañeros de cartel, así como la falta de apoyo institucional y de espacios de representación óptimos, hicieron que este trío de actores tuviera claro que, ahora, era el momento del microteatro en la Isla”. Indica que “esta iniciativa, pionera en La Palma, se fraguó cuando la compañía se topó con el apoyo de Carmen Asensio, que recientemente había decidido convertir su lugar de trabajo en una peluquería cultural, cediéndola para distintos proyectos artísticos”.
Con textos de Griselda Gambaro, Rafael Mendizábal y Carmen Rico Godoy, y música de Paolo Conte y Jovanotti, “los protagonistas de Sin pelos en la lengua nos hablan de una herida que no se les cura; su propia sombra, de la que son ignorantes, pero que les tiende una emboscada al entrar en contacto con la luz de los focos. Así, sin querer queriendo, uno por uno va desvelando sus más oscuros secretos que, paradójicamente, resultan ser su propio mar de contradicciones”. Cruzado Mágico pretende conseguir “toda la cercanía posible con el público; no sólo física, al interpretar en la butaca contigua, sino emocional. Los actores invitan al espectador a que se ría con estos charlatanes, sincera o cínicamente, según lo contado, pero que los acompañe realmente en el viaje interior que hacen, a medida que avanza su desinhibido relato”.
Durante seis sesiones, agrega, “el público palmero se ha prestado gustoso a esta comprometida invitación. Viernes tras viernes ha decidido ser cómplice de Héctor, Matilde y Gerarda y respaldar esta propuesta cultural alternativa. A través, sobre todo, del boca a boca, y por un precio asequible para cualquier bolsillo, los espectadores han dicho sí al microteatro ¿Pero habrá llegado este vanguardista género a La Palma para quedarse?”.
