Analizan los riesgos que presenta la abrupta orografía de La Caldera de Taburiente
El pasado 2 de septiembre se llevó a cabo en el interior del Parque Nacional de La Caldera de Taburiente un simulacro de conato de incendio forestal. El ejercicio se desarrolló en el entorno de la zona de acampada y sistema de autoprotección del Centro de Servicios de Taburiente. Participaron efectivos de la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) con base en Puntagorda, personal de la Unidad de Medio Ambiente del Cabildo y retenes del Parque Nacional.
Como parte de la maniobra se “analizaron los diversos riesgos que presenta la abrupta orografía de la Caldera de Taburiente, además de la gestión de los visitantes en caso de emergencia”, según explica un portavoz del principal espacio natural protegido de La Palma. También “se simuló el ataque a un conato de incendio forestal en la zona de acampada”. Se comprobó igualmente “la efectividad de las zonas acondicionadas en el barranco como puntos de aterrizaje en caso de emergencia”.
Otro de los objetivos de este simulacro fue “comprobar la operatividad de carga de agua en el único depósito del interior de la Caldera de Taburiente, autorizada por el Heredamiento de las Haciendas de Argual y Tazacorte”.
En el transcurso del ejercicio se utilizó una motobomba de mochila portátil para captación del agua del barranco.
