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Albert Rivera: “Nos sobran los motivos”

Rivera, aclamado una vez más en el hotel Nelva de Murcia

Elisa Reche

Murcia —

Albert Rivera parafraseó a Sabina en la clausura del mitin de Ciudadanos en Murcia. Y no, motivos no le faltan para estar contento en una región donde las encuestas pronostican que obtendrá el mayor número de votos tras Cataluña, y donde podría conseguir hasta tres escaños pasando por delante del PSOE. “En Murcia nunca falláis; sé que esto puede molestar a algunos”, espetó al auditorio el líder de C's.

El acto comienza con un minuto de silencio por los dos policías fallecidos en el ataque a la Embajada española en Kabul. Rivera condena que el Gobierno haya manipulado la información sobre el atentado que definitivamente sí tenía como objetivo los intereses de España. “Necesitamos un pacto antiyihadista todos unidos, como unidos vencimos a ETA”, subraya con maneras de hombre de Estado.

Después alaba a los suyos y se muestra orgulloso de que su partido en la Región de Murcia, “con tan sólo cuatro diputados”, haya conseguido “cambiar cosas que no se habían logrado cambiar en 30 años, como la ley electoral”.

Albert Rivera está cansado de “rojos y azules” y quiere una España unida en el naranja: “Ni los partidos viejos son capaces de ofrecer reformas ni los extremistas de llegar acuerdos; somos el único partido capaz de hacer una reforma de calado”, dice el líder de C's, visiblemente más tranquilo que en el 'Debate Decisivo' de televisión a cuatro de Atresmedia.

Reventar todo desde dentro

En la planta baja del hotel Nelva, Pedro está de acuerdo. Pedro es un técnico de ascensores de 52 años que se quedó en paro hace un tiempo, y afirma haber votado tanto a PP como a PSOE, pero señala: “Ya estoy cansado de que los partidos piensen que el chiringuito es suyo, necesitamos una explosión y éstos lo van a reventar todo desde dentro”.

El estudiante de ADE de 21 años Bernardo López también valora que C's “no pierde de vista los números, teniendo en cuenta lo social; el PP sólo apoya los recortes y los proyectos de infraestructura inservibles”. Y en este sentido, Albert Rivera afirma de forma rotunda que con él “la España de la chequera y las infraestructuras faraónicas pasará a mejor vida”.

Sobre todo, Rivera no promete “ni dinero ni puestos de trabajo como Rajoy”, ahora que se acerca la Navidad y los Reyes Magos, sino “valores, compromisos y proyectos para un país”. “Con un equipo de 50 economistas, nosotros tenemos propuestas concretas”, añade. A pesar de su afirmación de que a C's le gusta “jugar bonito”, Rivera ataca por la izquierda y la derecha a aquellos que tienen de “modelo a Grecia o Venezuela”, y a quienes “tienen experiencia de robar durante 30 años”. Su partido, en cambio, es “de centro, moderado y razonable”, como él se empeña en lucir, olvidándose de las fotos que circulan por las redes sociales.

En su obsesión por la unidad, Rivera también recala en un pacto por la educación de “todos los partidos y la comunidad educativa”, y nos recuerda que podría ser un gran presidente: “entre otras cosas porque llevo ocho años intentando que España siga unida desde Cataluña”.

Ante un auditorio de unas 1.200 personas de todas las edades, Rivera luce su parte más Kennedy y Suárez, citando a ambos políticos durante el mitin. A C's les corresponde poner en marcha “una segunda transición” en España. Apela a “los nacidos en democracia para asumir responsabilidad y hacer cosas en política”.

Frente al hotel de cuatro estrellas se encuentra la barriada marginal de La Fama. Ocho chavales están sentados alrededor de un banco. “Nosotros somos gitanos, vendedores ambulantes, acabamos de cerrar el puesto de flores de pascua”, afirma uno de ellos. “Voy a votar a Ciudadanos porque mi compadre Antonio no para de hablarme de lo mismo”. Antonio les apoya porque quiere que “cambie el presidente”. Me voy a casa con una flor de pascua en el regazo.

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