El colectivo +mujeres concede los Premios Lechuza y Topo
Desde su nacimiento, hace dos años, el colectivo +mujeres ha decidido luchar a favor de la igualdad entre hombres y mujeres en la cultura, subrayando las conductas que contribuyan a esa igualdad o que la dificulten. Con este fin, el colectivo concede por primera vez los premios Lechuza y Topo por la igualdad de las mujeres en la cultura.
Los premios Lechuza y Topo 2017 se entregarán en un acto público el día 28 de enero en la Cafetería Ítaca, a las 20h, durante la fiesta de los Premios Lechuza y Topo organizada por +mujeres.
+mujeres quiere distinguir con el Premio Lechuza a las instituciones, organismos y/o personas que, en el desempeño de su labor social y a través de las acciones que realizan, contribuyen a la igualdad entre mujeres y hombres. El Premio Topo se otorga al organismo o persona física cuya labor se aleja de la igualdad exigida por la Ley de Igualdad efectiva entre hombres y mujeres y perpetúa, a través de sus prácticas, la desigualdad estructural que todavía hoy detectamos.
Desde +mujeres, quieren reconocer con esta distinción, el trabajo de la Concejalía de Cultura de Cartagena, que en colaboración con la Concejalía de Igualdad y de otras áreas municipales, y desde el año 2015, promueve la presencia equilibrada de mujeres y hombres en la oferta artística y cultural pública.
Las programaciones culturales de Cartagena, en la que ninguno de los sexos está representado por encima del 60%, son: Leer, pensar, imaginar, la programación trimestral del Centro Cultural Ramón Alonso Luzy, el festival de arte emergente Mucho Más Mayo y el Festival Poético Deslindes.
“La lechuza está vinculada desde la mitología con la sagacidad y la sabiduría, la lechuza, provista de unos ojos que penetran en la oscuridad, puede alzar el vuelo al caer la luz. Esta es una capacidad que las mujeres han tenido que desarrollar frente a las condiciones de desigualdad de una cultura patriarcal que ha obstaculizado, de forma explícita e implícita, el reconocimiento sus creaciones artísticas, culturales y científicas, de forma que no han contado con las mismas oportunidades de promoción que los hombres”, subrayan desde +mujeres.
La presencia equitativa de mujeres y hombres en estas programaciones culturales es una clara muestra de que “la igualdad es una cuestión de voluntad política y de compromiso social”, señalan desde el colectivo +mujeres. “Estas, a su vez, son necesarias para que la producción artística e intelectual de las mujeres cuente con el mismo espacio y visibilidad que el de los hombres, sin que haga falta alzar el vuelo en condiciones de desigualdad”, añadieron.
El el premio se entregará al concejal de Cultura e Igualdad: David Martínez Noguera, o la persona designada por él.
El colectivo otorga, en cambio, el Premio Topo a la Consejería de Educación y Universidades porque “ha tardado demasiado tiempo en diseñar un plan de Igualdad para la Administración Regional y Local de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia. Aunque se legisló en la materia hace ya 10 años, mediante la Ley Orgánica 3/ 2007, las acciones encaminadas a favorecer la igualdad entre mujeres y hombres han sido hasta ahora nulas o escasas”.
La Consejería de Educación y Universidades de la Región de Murcia “aprueba la segregación por sexos en las aulas, puesto que subvenciona con fondos públicos establecimientos escolares que realizan estas prácticas anti-educativas que son contrarias a lo establecido en la propia Constitución Española”, dijeron desde el colectivo.
Por último, “otro motivo por el que se entrega el Premio Topo a la Consejería es por aprobar, para esta Comunidad Autónoma, libros de texto que continúan explotando la desigualdad entre hombres y mujeres, no visibilizando las aportaciones que, a lo largo de la historia, las mujeres han hecho al patrimonio cultural, científico-tecnológico y artístico de la Humanidad”, añadieron.
El premio se entregará a María Isabel Sánchez-Mora Molina, consejera de Educación y Universidades de la CARM, o la persona designada por ella.
“Los ojos del topo son diminutos y, en ocasiones, están recubiertos de piel. Apenas les permiten ver, pero esto no es impedimento para que el topo continúe cavando sus túneles, cansando daños en cultivos y zonas verdes. La inercia cultural que, por tradición, tiende a destacar y promocionar la producción científica y cultural de los hombres frente a la de las mujeres, también daña la capacidad que tienen las mujeres de contribuir con sus creaciones al campo de la cultura y de la ciencia”, señaló el colectivo.
“El premio Topo quiere alertar sobre aquellas prácticas que obstaculizan la presencia de las mujeres en los ámbitos culturales, científicos y educativos, contribuyendo a que sus obras no salgan a la luz o permanezcan en los márgenes, socavando con ello, como hacen los topos con la tierra, la diversidad y riqueza creativa de nuestra sociedad”, concluyeron desde +mujeres.
