IU aboga por una senda del Litoral Norte con “las mínimas intervenciones posibles”

El candidato por Izquierda Unida a la Alcaldía de Santander, Miguel Saro, ha abogado por una senda del Litoral Norte con “las mínimas intervenciones posibles”, y ha denunciado que se quiera convertir en “pasto del hormigón” la “única área natural que queda en el municipio”.

En este sentido, Saro ha recordado en nota de prensa que su formación apuesta por un modelo “naturalizado, que respete los caminos ya existentes y con actuaciones mínimas que potencien las zonas de especial valor paisajístico, geológico y natural”. “Nada de intervenciones distintas a las que no sea eliminar especies invasoras y una señalización mínima”, recalca.

Para el abogado santanderino, que ha prestado asesoramiento jurídico a la Asamblea en Defensa de la senda y Costa Norte de Santander, el proyecto de la Dirección General de Costas, “delante del cual se puso el actual alcalde desde el primer momento”, apostilla, “supone una actuación exagerada que desnaturaliza el medio y destruye parte de la riqueza geográfica, incluso algunos elementos arquitectónicos protegidos por el planeamiento de la capital”.

Saro considera que el proyecto en ejecución “esconde otros intereses distintos de los predicados por su memoria inicial”. “Van a eliminar los únicos valores naturales que quedan en Santander y entregar la zona a la especulación urbanística a través de la creación de un campo de golf de 18 hoyos y las consiguientes urbanizaciones que edificarán alrededor”, denuncia.

Añade que en el límite de los terrenos protegidos por el Plan de Ordenación del Litoral (POL), el Ayuntamiento “pretende construir cientos de nuevas viviendas”. “Es algo que no esconden y es público, puesto que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) aprobado en 2012 ya prevé un crecimiento de la ciudad hasta los 240.000 habitantes”, algo que es “una falsa premisa”, porque “en realidad la ciudad pierde 1.000 habitantes por año”.

“Es la excusa para construir segundas y terceras residencias de temporada para intentar vendérselas a veraneantes en una ciudad que languidece”, afirma Saro, que también aprecia “irregularidades jurídicas” en la senda.

Así, señala que el proyecto “ha pasado por encima” de la regulación del Plan Especial de Sendas y Caminos de litoral aprobado en el año 2010, pero que desarrolla el POL, con entrada en vigor en octubre de 2004, “por lo que la actuación administrativa posterior debería haber estado presidida por el principio de cautela y respeto por el Medio Ambiente”.

Explica que el Plan “prescribía la menor intervención posible” en las zonas donde se ha ejecutado la senda costera, y esas normas “ya estaban en vigor cuando se inició la construcción”. Según el candidato de IU, Costas y el Ayuntamiento de Santander “han obviado por completo toda medida de cautela” en la redacción y ejecución del proyecto, porque “lo que se está preparando es ese desembarco de los constructores en la zona norte de la capital”.

“Quieren convertir la única área natural que queda en el municipio en pasto del hormigón y nosotros creemos en un municipio sostenible que respete el medio ambiente, no queremos alimentar una nueva burbuja de ladrillo y corrupción”, afirma.

La Asamblea en Defensa de la senda y Costa Norte de Santander se reúne de nuevo este jueves a las 19.45 en el Hogar San Pablo de Cueto y a ella asistirá también Miguel Saro.