Santander sigue los pasos del Gobierno y se reunirá con la SAREB
El Ayuntamiento de Santander seguirá los pasos del Gobierno de Cantabria y se pondrá en contacto con los responsables de la SAREB (Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria) para que la sociedad que gestiona los inmuebles del 'banco malo' oferte en la ciudad vivienda en régimen de alquiler social.
Así lo ha anunciado este viernes el alcalde, Íñigo de la Serna, tras haber mantenido una reunión con distintas entidades financieras. El anuncio del regidor municipal se produce justo diez después de que el consejero de Obras Públicas y Vivienda, José María Mazón, informara que su departamento trabaja en la actualización del Registro de Demandantes de Vivienda de Cantabria, de cara a la preparación de un convenio con la SAREB.
El acuerdo al que llegó el Ejecutivo cántabro con Gaspar González Palenzuelay José Díaz Merediz, directores de Responsabilidad Social Corporativa y Gestión Social de Activos, es que la Administración regional elaborará un mapa por municipios “para ofrecer viviendas con alquileres sociales en los lugares en los que realmente exista demanda”
En este sentido, De la Serna ha reconocido que puede existir duplicidad con la iniciativa del Gobierno regional. “Si se puede hacer desde el Ayuntamiento, estupendo”, ha dicho el alcalde, apuntando que si fuera “más operativo” conducir esta acción desde el Gobierno, el Consistorio ofrecerá “máxima colaboración”.
Además de esta propuesta, el regidor municipal ha avanzado que el Ayuntamiento quiere ampliar el convenio con las entidades financieras en torno a las 18 viviendas del Fondo Social. Hasta ahora el Ayuntamiento no tenía ningún control sobre estos pisos, de modo que la Administración local se limitaba a pasar a las entidades posibles beneficiarios, desconociendo si los bancos estaban dando un uso social a los inmuebles o por el contrario estaban vacíos.
A partir del acuerdo alcanzado este viernes, el Ayuntamiento podrá realizar la selección o llevar a cabo un proceso de captación de personas que puedan cumplir con los requisitos establecidos por el Fondo, que la pasada semana se acordó ampliar, así como flexibilizar las condiciones de acceso.
