Se rompen las negociaciones entre la gestora de Nestor Martin y el comité de empresa

Las negociaciones entre la gestora de Nestor Martin y el comité de empresa se han roto este martes, tras la tercera reunión entre ambas partes para negociar los 41 despidos previstos en la plantilla, compuesta por 98 trabajadores, y para los que sus representantes reclaman una “salida digna”.

Las negociaciones se han roto porque la gestora considera “insuficiente” para afrontar los despidos y el plan de viabilidad los 2,2 millones que restan de los 3 millones contemplados para la empresa en los presupuestos de Cantabria de 2015, según ha indicado a Europa Press Luis Gómez, presidente del comité, que ha reclamado la intervención del Gobierno de Ignacio Diego.

El sindicalista ha señalado también que es “fundamental” que intervenga el Ejecutivo del PP, ya que las negociaciones están “enquistadas” y “no hay ninguna forma de que avancen”. Y en este sentido, ha señalado que estos días los representantes de los trabajadores se están reuniendo con dirigentes y portavoces de distintos partidos políticos que se presentan a las elecciones del próximo 24 de mayo, para tratar de “sacar a la luz” la situación en que se encuentran y “a ver si se les pone la cara colorada a los dirigentes”.

Además, han solicitado permiso para concentrarse este viernes, 8 de mayo, a las 11 horas ante la sede del Gobierno de Cantabria, en la calle Peña Herbosa de Santander. Gómez ha señalado que de los tres millones previstos en los presupuestos regionales del presente ejercicio para la empresa quedan 2.286.000 euros, ya que se 714.000 se han gastado ya en pagos urgentes que tenía pendientes la compañía.

Así, con esos 2,2 millones Néstor Martin tiene que afrontar los despidos previstos y hacer el plan de viabilidad, cuantía que resulta “insuficiente” para la gestora. A este respecto, el portavoz del comité defiende que los trabajadores que van a ser despedidos recuperen el dinero que invirtieron en su día: 3,2 millones aportados por 87 empleados, de las indemnizaciones por el ERE de extinción de Teka y de los que se incorporaron a la nueva fábrica de estufas.

Sin respuesta

“Hemos tocado todas las puertas y todos se apartan”, se ha quejado Gómez, para referirse a las reuniones mantenidas con Sodercan, el consejero de Industria, Eduardo Arasti, o a la solicitada hace “mes y medio” al presidente autonómico, Ignacio Diego, y que aún no les ha “recibido”.

Con todo ello, el presidente del comité ha reclamado la intervención del Gobierno para buscar fórmulas que permitan a los trabajadores que van a ser despedidos “salir de la empresa en condiciones dignas”. De momento, y tras la ruptura de las negociaciones entre la gestora y el comité, no están previstos nuevos encuentros entre ambas partes, aunque el periodo de negociaciones de un mes concluye el próximo 27 de mayo.

Apoyo de Teka

Ante este nuevo conflicto laboral, el comité de empresa de Teka Industrial, en representación de toda la plantilla de la fábrica de Santander, ha mostrado este martes su apoyo a los trabajadores de Nestor Martin y ha destacado que el Gobierno de Cantabria, que “intervino en la negociación” del ERE de extinción de Teka, “nos aseguro que se trataba de un proyecto fiable, viable y estable, con estudios que así lo demostraban”.

“Es por este motivo por lo que nuestros excompañeros cedieron sus indemnizaciones y por lo que ahora están instando al Gobierno a que medie, pues en solo dos años vuelven a sufrir un ERE de extinción”, señala el comité en un comunicado de prensa. Por ello, los representantes de los trabajadores de Teka entienden que sería “lógico, justo y razonable” que estos trabajadores al menos percibiesen la indemnización pactada en el ERE de suspensión de Teka, ya que en su día lo entregaron para impulsar un nuevo proyecto.

El comité de Teka considera “totalmente injusto que por una gestión inadecuada pierdan sus indemnizaciones, su puesto de trabajo y hayan utilizado el paro que les correspondía en los ERES temporales que han sufrido en estos dos años de andadura de la empresa”. Por todo ello, muestran toda su solidaridad a los trabajadores y su “total indignación por la gestión hecha”.