Alcalde pide una reunión “urgente” con Gobierno y Alsa por la supresión de la línea con Torrelavega

El alcalde de Santillana del Mar, Isidoro Rábago, ha pedido una reunión “urgente” con miembros de la Consejería de Industria, con competencias en transporte, y de ALSA por la supresión de la línea que une la villa con Torrelavega y que se suprimirá a partir del 1 de enero, hecho de lo que ha asegurado no tener comunicación oficial.

En un comunicado, Rábago ha defendido el mantenimiento de la línea de autobús de ALSA entre la villa y Torrelavega y ha mostrado su “malestar” y “perplejidad” por no tener conocimiento oficial de la supresión del servicio a partir del 1 de enero.

“Según parece”, ha apostillado el alcalde, que ha explicado que el Ayuntamiento “aún no ha recibido ninguna notificación oficial” al respecto ni de la Consejería de Industria, competente en el asunto, ni de la Dirección General de Transportes y tampoco de ALSA.

Para Rábago, esta ausencia de comunicación es “una absoluta falta de respeto” para la Corporación municipal y “sobre todo”, según ha apuntado, para los vecinos del municipio que habitualmente utilizan esta línea con Torrelavega.

REUNIÓN “URGENTE”

Ante la ausencia de información por parte de los organismos competentes y de la empresa adjudicataria del servicio, el alcalde de Santillana del Mar se ha puesto en contacto telefónico con la Consejería de Industria del Gobierno de Cantabria que dirige Francisco Martín para solicitar una “reunión urgente”.

En ella se quiere abordar las posibles soluciones que se le pueden dar a unos vecinos y comerciantes de la villa que, según ha advertido el alcalde, están “pendientes” de lo que va a suceder con el servicio de autobuses a Torrelavega del que “muchos de ellos dependen” para acudir a su trabajo, al médico o a realizar sus compras y también de muchos trabajadores de hostelería que residen en Torrelavega y vienen a trabajar a Santillana en autobús“.

Rábago se ha mostrado dispuesto a reunirse con los responsables de la consjería así como con los responsables de la empresa ALSA para establecer un diálogo a tres partes que aborde “soluciones inmediatas para los vecinos de Santillana”.

Respecto a la otra línea de autobús de que dispone el municipio, la adjudicada a la empresa La Cantabrica, Rábago ha matizado que se trata de un servicio “distinto” ya que su trayecto discurre por una parte “muy pequeña del municipio y alejada de los núcleos más poblados del mismo”, como son las localidades de Queveda y Viveda.

Por ello ha defendido que debe mantenerse la línea actual de ALSA para dar servicio a estas poblaciones.