Movellán insta a la alcaldesa a negociar el presupuesto de 2018

El portavoz municipal del PP y exalcalde de Camargo, Diego Movellán, ha afirmado que el Ayuntamiento no debería continuar con un presupuesto prorrogado, y ha trasladado a la alcaldesa, la socialista Esther Bolado, la urgencia de iniciar la búsqueda de una posición común que permita asegurar un presupuesto para 2018.

Movellán ha dicho que el PP está “dispuesto a ser generoso” pero advierte que esa “generosidad ni es ciega ni es ilimitada”. Ha añadido que el Partido Popular está “preparado para valorar el apoyo a un presupuesto para 2018 si el equipo de Gobierno (PSOE-PRC) está dispuesto a tomar en serio el mensaje que le trasladamos en nombre de la mayoría de votantes camargueses”.

“Por el bien de los vecinos y de la posición de Camargo en Cantabria, no deberíamos continuar con un presupuesto prorrogado, pero no seremos nosotros los responsables si el equipo de Bolado y Lavín fracasa también en la tarea de desbloquear está situación”, afirma el exalcalde en un comunicado de prensa.

Movellán explica que ha trasladado personalmente este mensaje a la regidora, y subraya que “tan pronto mantengamos un encuentro bilateral comenzaremos a avanzar en la búsqueda de fórmulas para hacer viable el presupuesto”. Estas fórmulas pasan, según ha explicado el también diputado nacional por “algunas cuestiones de forma y otras de fondo”.

Entre las primeras ha destacado que “los votantes 'populares' no renuncian y así me lo han transmitido, a hacer valer el peso representativo que les confiere ser la primera opción votada para el Gobierno municipal”. En su opinión, “el mandato de nuestros votantes pasa por no ver a sus representantes sentados a la misma mesa de negociación que los representantes de Izquierda Unida y Ganemos”.

A su juicio, la explicación es clara, “no se trata de mercadear, de apañar ni de repartirse nada sino de trasladar al Gobierno la voz de los gobernados que en su mayoría es la de los 'populares' y que ahora mismo -dice- está ausente pese a que es, a día de hoy, la única capaz de sostener al Gobierno”.

En cuanto al contenido de fondo de la negociación, Movellán no cree que haya “diferencias sustanciales” entre lo que esperan los camargueses del presupuesto para 2018 hayan votado a quien hayan votado en las pasadas elecciones. Y ello porque a su entender, “la prioridad es obvia: recuperar el bienestar que se nos ha escapado mientras quienes debían protegerlo se peleaban entre sí”.

Para Movellán, “el mandato de los votantes 'populares' es claro y en casi todos los puntos lleva la palabra recuperar porque estos más de dos años Camargo ha perdido mucho más que el tiempo”.

Según explica, esto se traduce entre otras cuestiones en “volver a mimar las políticas sociales que se han tratado en esta legislatura como si fueran una bandera a la que agarrarse, de la que los partidos inicialmente en el Gobierno han tirado y que al final han terminado hechas trizas”.

Para el exalcalde, “ahora socialistas y regionalistas tienen la oportunidad de hacer algo bueno por Camargo: coger la mano que les tendemos y sacar a 33.000 personas del pozo en el que les ha metido el cuatripartito antes de que el agua les empiece a llegar al cuello”.

Movellán añade que “desaprovechar esta invitación es desairar a la mayoría de los hombres y mujeres para los que trabajan, que nos dieron su confianza mayoritaria y que están dispuestos a ser generosos ahora apoyando un presupuesto que no es nuestro y que seguramente no nos va a satisfacer plenamente pero cuya generosidad ni es ciega ni es ilimitada”.

Asimismo, afirma que los votantes 'populares' están “haciendo un sacrificio al apoyar a un Gobierno que no eligieron y en el que dos años después tampoco confían pero es algo que ya hicimos al apoyar en su día a Ángel Duque y que trataremos de poder hacer siempre que sea necesario porque al final no se hace por uno u otro alcalde, se hace por tu vecino”, agrega.

Por último, Movellán ha dicho que confía en “la experiencia y el talante” de los miembros del equipo 'popular' que participarían en una negociación sobre el presupuesto en la que “no se trata de quien gane, sino de evitar que Camargo salga perdiendo”.