La abstención de Podemos da vía libre al Gobierno para aprobar los presupuestos

El pleno del Parlamento ha iniciado este martes el trámite final para aprobar los presupuestos de Cantabria para 2016 y la Ley de medidas fiscales que los acompaña. El documento, que asciende a 2.465 millones de euros, quedará aprobado de forma definitiva este miércoles con la abstención de Podemos y el voto en contra de PP y Ciudadanos.

La formación morada alcanzó a finales del mes pasado un acuerdo con los partidos del Gobierno (PRC y PSOE) para permitir a estos salvar su minoría en la Cámara autonómica a cambio de que el Ejecutivo lleve a cabo una reforma fiscal que aumente los tipos del IRPF sobre las rentas más altas -a partir de 55.000 euros brutos al año- y obtener así recursos extra que serán dedicados a los servicios sociales y el empleo.

De esto modo, durante la sesión no se han producido grandes sorpresas sino que ha quedado como un procedimiento formal en el que los partidos han escenificado los argumentos que ya han defendido en las distintas comisiones parlamentarias en las que se ha analizado el gasto área a área. 

No obstante, el debate también ha servido para visualizar, una vez más, la fractura del Parlamento en dos grandes bloques: por un lado, PP y Ciudadanos, que comparten posicionamiento en la mayoría de los casos y, por otro, los grupos regionalista y socialista, que sustentan al Gobierno y que, por tanto, son indulgentes. En medio Podemos, que reparte al bipartito loas y críticas casi a partes iguales.

En cuanto al presupuesto, todos los grupos de la oposición han coincidido en expresar sus dudas sobre el cumplimiento de la previsión de ingresos. PP y Ciudadanos creen que las cuentas están “infladas” y son “ficticias” y advierten que van a desencadenar en un aumento de la deuda y en el incumplimiento del objetivo de déficit.

A Podemos tampoco le salen los números aunque la formación ha dado un voto de confianza al Gobierno. Eso sí, a cambio de un “trato”: “Nos pide que confiemos en su criterio, lo vamos a hacer, voy a confiar en usted, pero si el año que viene cuando traiga el presupuesto de 2017, estos ingresos no se han cumplido, le pido que voluntariamente dimita, y en el caso de que no dimitiera, Podemos presentará una moción para instar al presidente a que le destituya”, ha anunciado desde el estrado el portavoz José Ramón Blanco dirigiéndose a Juan José Sota, consejero de Economía y Hacienda.

Sota, que no ha podido responder a Podemos puesto que el Gobierno únicamente interviene al comienzo del debate, ha insistido en que es un presupuesto “realista y austero” con dos objetivos prioritarios, recuperar el gasto social y “restañar” los recortes del Gobierno del PP en esta materia, y “propiciar el cambio de patrón de crecimiento”.

“Se habría que definir a este presupuestos por algo, es porque 3 de cada 4 euros se dedica a las políticas que más afectan directamente a la ciudadanía, la salud, la educación, la universidad, los servicios sociales y el empleo, ese gran problema de Cantabria en el que tenemos que hacer todo el esfuerzo posible”, ha asegurado.

Presupuestos de “transición”

Pese a ello, el consejero socialista ha reconocido que no es el presupuesto que le gustaría, descargando la responsabilidad en la crisis, la herencia recibida y el déficit con el que los nuevos responsables de la Administración autonómica se han encontrado para presentar unos presupuestos que ha calificado de “transición”. 

El PP, en cambio, ha apoyado sus reproches en un informe de la AIREF (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal), que sostiene Cantabria acabará a 31 de diciembre de 2016 con un déficit del 0,9%, es decir, “el triple de lo permitido”, según ha señalado la diputada popular Cristina Mazas, quien además ha incidido en que el presupuesto “no va a servir para mejorar la calidad de vida de los cántabros.

Por su parte, Ciudadanos ha acusado al bipartito de repetir los errores del pasado con unas cuentas que “no van a sacar a Cantabria de la crisis” y, además, les ha reprochado la “falta de diálogo y de negociación” con los grupos de la oposición, excepto con Podemos, que, a su juicio, se ha convertido en la tabla de salvación de un Gobierno en minoría.

“La realidad es que ha habido un grupo parlamentario que desde el comienzo de la legislatura no ha ejercido de oposición, sino que ha estado plegado a los intereses del Gobierno, pero no ha sido gracias a sacar reformas y proyectos, su único objetivo era pescar unos pocos votos o todos los que pudiera en las elecciones que se han celebrado el pasado domingo. Yo les doy la enhorabuena, ya lo han conseguido. Ahora la pregunta es si, una vez que ya no hay votos en juego, va a seguir esto así”, ha aseverado el portavoz de C's, Rubén Gómez.

“La mano de Podemos”    

Una visión completamente distinta tiene Blanco, quien ha asegurado que en una gran parte de las secciones del presupuesto “se palpa la mano de Podemos” y ha afirmado que si es “el más social de la historia de Cantabria” es “única y exclusivamente” gracias a que su partido está en el Parlamento.

El portavoz de Podemos ha confiado en que los presupuestos de 2017 sean “mucho más sociales” pero ha destacado que en los de 2016 “ya hay partidas para rescatar a la ciudadanía”, como el plan de emergencia habitacional incluido en la Ley de Acompañamiento, y ha recalcado que “todos los partidos están obligados a dialogar y pactar”, porque “se ha acabado el tiempo de hoy te toca a ti y mañana me toca a mi”.