Patricia Elorza: “No voy a dejar de ir a unos Juegos Olímpicos por un mosquito”

“No voy a dejar de ir a unos Juegos Olímpicos por un mosquito”. Así de tajante se ha mostrado la jugadora internacional de balonmano Patricia Elorza en declaraciones a los medios antes de la mesa redonda 'El deporte femenino de alto nivel' que se celebró en la tarde de ayer miércoles en el Ayuntamiento de Colindres dentro de los Cursos de Verano de la Universidad de Cantabria (UC).

La deportista vasca, que está seleccionada en la primera convocatoria para ir a Brasil -la lista definitiva se conocerá el próximo mes de julio-, compartió mesa en el Ayuntamiento de Colindres con la exgimnasta María Pardo y la campeona de Europa de Salvamento Marítimo Itziar Abascal, en un coloquio moderado por el profesor de la UC José Gutiérrez.

Jugadora de balonmano “desde niña”, Elorza confirmó que si finalmente es seleccionada irá a los Juegos de Río “sí o sí”. El “riesgo” es el mismo que “si te vas a África y te pica un mosquito”, afirmó, y añadió que, en su opinión, el problema está en la “desinformación” que hay sobre el asunto. “Creo que los deportistas que han hablado sobre ello querían llamar la atención para que no se deje el problema de lado. Es una manera de que se nos informe, de saber más sobre ello”, opinó.

Por otra parte, la jugadora de balonmano también reivindicó “más apoyo económico” para unas disciplinas deportivas que pasan desapercibidas porque con más dinero “hay más nivel, es más atractivo y logras que lo vea más gente”, aseguró.

De la misma opinión es la exgimnasta y ahora entrenadora María Pardo, quien se mostró desesperanzada al considerar que en los informativos “llaman deporte” a una sección donde “solo se habla de fútbol”. “Creo que siempre será así y no depende de si es minoritario”, tampoco consideró que se deba a una cuestión de género, sino que “es el deporte rey, mueve masas, llena estadios y tiene mucha publicidad. Contra eso no se puede”, se lamentó.

Sobre la gimnasia rítmica opinó que en la actualidad vive una época de esplendor y rememoró sus grandes logros de antaño, una brillante carrera deportiva que cerró cuando solo quedaban dos meses para los Juegos de Atlanta de 1996. “Había un trato humano por parte de la federación y los técnicos de entonces” que no pudo soportar.

“Gracias a Dios ahora ha cambiado mucho, desde el presidente a los técnicos. Yo empecé con 14 años y ahora las chicas tienen más de veinte. Vivíamos todas concentradas”, compartiendo la misma casa y ahora “están integradas en un centro de alto rendimiento con más deportistas y están estudiando sus carreras, es otra cosa”, rememoró. Aunque era consciente de que estaba en la Selección Española y que había que entrenar duro, echó en falta “alguna palmadita” en la espalda. No obstante, se mostró feliz y calificó el cambio como “abismal”, con chicas que están obteniendo los mismos resultados con menos presión. “Están cumpliendo sus objetivos y consiguiendo medallas” en distintas competiciones, concluyó quien fuera campeona del mundo.

Por último, Itziar Abascal, campeona de Europa de Socorrismo Marítimo, también quiso referirse a esa “discriminación” que sufren los deportes minoritarios. A su entender, “es frustrante” porque aunque entiende que “el fútbol mueve masas”, consideró que hay que dar oportunidad a otros deportes que, como el suyo, apenas se conocen, pero que enganchan a quien lo prueba.

Sobre la igualdad masculina y femenina en el deporte consideró que aún existe “discriminación” pero que programas como Mujer y Deporte están cambiando las cosas. “En mi Federación de Salvamento y Socorrismo nos ayudan bastante pero no sé si realmente es beneficioso porque se trata de una disciplina muy igual para chicos y chicas y con las subvenciones nos llevan a nosotras a muchas concentraciones y ellos están comenzando a quejarse”, reconoció.