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Un veterinario cántabro gana el premio europeo de investigación sobre diarrea vírica bovina

Un veterinario cántabro gana el premio europeo de investigación sobre diarrea vírica bovina

EUROPA PRESS

SANTANDER —

El galardón, que ha recaído en este experto en clínica de rumiantes, lo concede la multinacional farmacéutica Boehringer Ingelheim, y ha sido entregado este martes por el consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación del Gobierno regional, Jesús Oria, en un acto en el que ha participado también el presidente del Colegio Veterinario de la Comunida, Juan José Sánchez, y representantes del laboratorio organizador.

Al certamen se han presentado 45 casos clínicos reales de “grandes expertos” en la materia de toda Europa, entre ellos el realizado por el profesional cántabro, titulado 'El extraño caso de la vaca Leandra y su hija Jamaicana'.

El autor (Vizcaya, 1975) ha valorado el reconocimiento que supone este premio a los trabajos clínicos de campos que se realizan para apoyar la ganadería.

En este sentido, Ajuriaguerra, Licenciado en Veterinaria por la Universidad de Zaragoza, ha valorado que se premien estudios sobre supuestos reales. Y, al mismo tiempo, ha llamado a todos los profesionales a “quitarse complejos de inferioridad”, ya que a su juicio los veterinarios de España están en las “primeras posiciones” del ranking europeo.

Así, este veterinario ha animado a sus compañeros a seguir ayudando a resolver los problemas a los que se enfrentan los ganaderos para que la cabaña “vaya bien”.

Para el presidente de la organización colegial el premio es “un plus” a la labor diaria que realizan los veterinarios, a ha vaticinado que va a redundar en beneficio de todo el sector.

“Es también un reconocimiento a la labor de los veterinarios clínicos que visitan todas y cada una de las explotaciones ganaderas de Cantabria para solucionar los problemas puntuales que allí se presentan, pero también para asesorarlas técnicamente de modo que sean más eficientes y viables, mejorando su rentabilidad”, ha señalado Sánchez.

ENFERMEDAD SILENTE: SE VE CUANDO SE ELIMINA

Por su parte, la representante de la farmacéutica que convoca el premio ha subrayado la aportación de los estudios presentados a la diarrea vírica bovina es una enfermedad “silente”, “oculta”, que se ve “cuando la has eliminado”.

La BVD presenta varias formas, desde casos subclínicos a agudos, que pueden provocar abortos, infertilidad, inmunosupresión e, incluso, la enfermedad de las mucosas, que es mortal.

Esta infección está muy extendida y acarrea pérdidas económicas que a menudo se subestiman porque no siempre se pueden atribuir de forma clara a esta enfermedad.

Y los animales infectados de forma persistente son una fuente de pérdidas por sí mismos, porque no suelen alcanzar todo su potencial genético y generalmente presentan una menor ganancia de peso, una mayor sensibilidad a las enfermedades y una disminución de la fertilidad.

Excretan el virus continuamente durante toda su vida, lo que provoca pérdidas relacionadas con la reproducción en las reses del rebaño que no están inmunizadas. Por esta razón, los animales persistentemente infectados, deberían identificarse y eliminarse del rebaño.

Las infecciones por BVD también tienen consecuencias para la fertilidad, puesto que provocan un mayor riesgo de muerte fetal y embrionaria, lo que se traduce en unas tasas de concepción y gestación menores, así como en una disminución del rendimiento reproductivo.

Igor Ajuriaguerra inició el estudio por el que ha sido premiado a raíz de un servicio de control de reproducción en una explotación de 80 vacas adultas, donde tenían problemas en su estado reproductivo.

El veterinario detectó un problema de abortos, y observó que las novillas de primer parto que entraban en el grupo de vacas en lactación, en su primera semana sufrían un aumento de temperatura, frecuencia respiratoria y cardíaca, que cursaba con disnea y tenía una pobre respuesta al tratamiento de antibióticos y antinflamatorios no esteroideos. Las vacas también lo sufrían, pero se recuperaban antes.

Todos estos síntomas hicieron pensar a este experto en el virus BVD, de la diarrea vírica bovina, por lo que comenzó a hacer las pertinentes pruebas, plasmando todo ello en un trabajo que le ha valido el premio europeo de investigación sobre la enfermedad.

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