Una Quiroga 'desaparecida' siembra de dudas a los populares vascos

“Arantza [Quiroga] va a estar un par de días sin agenda”. De esta manera se ha referido una de las pocas personas que está en el núcleo duro de dirigentes del PP vasco y que ha podido hablar a lo largo del jueves con la presidenta de los populares vascos. Aunque nadie sabe a ciencia cierta las intenciones, tras tener que dar marcha atrás a la Ponencia de Convivencia y Libertad después de la desautorización de su partido (en concreto del hombre fuerte en el PP alavés, Alfonso Alonso, y de las críticas de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Quiroga ha optado por desaparecer, sembrando un mar de dudas e incertidumbre entre la dirección del PP vasco.

Personas cercanas a la dirigente popular transmiten la idea de que en ningún momento ha presentado su dimisión ante la dirección de Génova, algo que también sostienen fuentes de la dirección nacional del PP, que quiere evitar a toda costa que se abra una crisis en el PP vasco a dos meses de las elecciones generales. De hecho, desde la dirección nacional las voces que han hablado públicamente el jueves lo han hecho para valorar positivamente la decisión de retirar la moción sobre la ponencia -en la que el PP pasaba de reclamar la “condena del terrorismo” a exigir el “rechazo expreso de la violencia”- y defender a Quiroga, como el secretario sectorial del PP y exalcalde de Vitoria, Javier Maroto. “Cuenta con el respaldo de la dirección nacional”, ha apuntado Maroto.

En Euskadi, tanto la secretaria general del PP vasco, Nerea Llanos, como el líder del PP en Gipuzkoa, Borja Sémper, han puesto en valor la figura de Quiroga, intentado de alguna manera taponar públicamente las críticas y la sangría por la incertidumbre que la “espantada”, en palabras de un dirigente del PP vasco, de Quiroga ha generado durante todo el jueves.

A primera hora, Llanos ha asegurado que “nadie tiene que dimitir” en el PP vasco después de que su líder, Arantza Quiroga, se viera forzada a retirar en 24 horas su propuesta para la creación de una Ponencia de Libertad y Convivencia en la que se sustituía la petición de condena del terrorismo por una exigencia de “rechazo expreso a la violencia”. La Asociación de Victimas el Terrorismo y el ministro y líder de los populares alaveses, Alfonso Alonso, censuraron el cambio y Quiroga sucumbió ante las críticas y presiones.

Escaño vacío en el Parlamento

Esta mañana Quiroga no ha acudido al Parlamento vasco, donde se celebra el habitual pleno de los jueves. Oficialmente, su ausencia se ja debido a una indisposición. Pero el hecho de que se mantenga desconectada de los dirigentes populares ha sembrado la incertidumbre entre los populares vascos. El vicesecretario Sectorial, Javier Maroto, ha respaldado a la dirigente vasca y en Génova se espera que la sangre no llegue al río y Quiroga se mantenga al frente del partido.

A primera hora, su secretaria general, Nerea Llanos, negaba cualquier posibilidad de dimisión en la cúpula del PP vasco a raíz de la censura de Génova a la iniciativa de Quiroga. Llanos incluso ha asegurado que Génova apoyaba su moción para crear 'la Ponencia de Libertad y Convivencia' en el Parlamento vasco, y ha destacado que EH Bildu “lo ha interpretado torticeramente”, lo que ha provocado que los populares la retiraran. En declaraciones a Radio Euskadi, Llanos ha reiterado que la retirada de su iniciativa obedece únicamente a “la interpretación torticera de EH Bildu”, que se lo ha atribuido como una “victoria”.

Además, ha insistido en que los populares vascos no han cambiado su discurso porque exigen que se deslegitime la violencia “con claridad” y ha negado que la retirada de la propuesta, un día después de presentarla en la Cámara, se haya debido a presiones de su partido desde Madrid.

Según ha asegurado, Génova apoyaba su iniciativa. “Nosotros cuando hemos hablado, precisamente, con Madrid, cuando han leído esta iniciativa, la han comprendido perfectamente y le han dado su apoyo”, ha apuntado.

En este sentido, ha recordado que se trata de “una iniciativa muy similar a la que sirvió de base para la ponencia que sí funcionó en la legislatura pasada” y la enmienda que el PP vasco planteó “a la ponencia que existe en esta legislatura (de paz y convivencia), pero que no funciona, desgraciadamente, porque hay partidos políticos que no han admitido esa base ética”.