UGT rechaza “cualquier despido traumático” en Siemens Gamesa y pide la dimisión de su consejero delegado

La dirección de Siemens Gamesa hizo pública este pasado lunes su intención de iniciar una reestructuración de hasta 6.000 empleos tras registrar una caída en sus ingresos del 12% en su primer semestre como empresa fusionada.

Tras este anuncio, según ha denunciado UGT en un comunicado, la compañía “ha convocado a la representación de los trabajadores dos veces, sin aportar ninguna información al respecto”, lo que, a su entender, representa una “falta absoluta de sensibilidad”.

Por su parte, la Federación de Industria de UGT ha rechazado “cualquier despido traumático”, teniendo en cuenta que, en la misma presentación de resultados en la que se anunció la reestructuración, se informó de “un EBIT subyacente pre PPA de 774 millones de euros en el ejercicio 2017”.

UGT ha recordado que, que durante los últimos años, los trabajadores provenientes de Gamesa “ya afrontaron una fuerte reestructuración”, tanto en las áreas corporativas como operativas, que llevó a tener “una plantilla muy ajustada a las necesidades del mercado”. “Así se ha ido reflejando en la valoración de Gamesa en los años anteriores a la fusión”, ha explicado el sindicato, que ha dstacado que “esta compañía tenía unos márgenes de beneficio muy altos”.

Por otra parte, ha destacado que los trabajadores procedentes de Siemens en Alemania pactaron una garantía del empleo de tres años ante la fusión. Según ha indicado, a esta situación, se suma el “trato discriminatorio” en las percepciones salariales.

De este modo, ha advertido de que la valoración del cobro de objetivos de la empresa “es un 130% de su salario bruto anual para los trabajadores procedentes de Siemens Wind Power, mientras que para los trabajadores de la antigua Gamesa, la empresa ha ofrecido un 46%”. Además, ha explicado, “se está implementando en estos momentos una subida de sus salarios anuales”.

“Todo esto supone una clara discriminación, estableciendo trabajadores de primera y de segunda según su origen geográfico”, ha denunciado UGT.

El sindicato ha apuntado, por otro lado, que, “en la fusión aprobada por la CNMV, se eximió a Siemens AG de lanzar una OPA, con el consiguiente ahorro que esto supuso para el grupo alemán, alegando que esta fusión estaba basada en el interés industrial y que nuestros negocios eran complementarios”. Para UGT, “el llamado interés industrial era simplemente la fagocitación de Gamesa al menor coste”.

“NO SE PUEDE HACER PEOR”

A su entender, “no se pueden hacer peor las cosas en tan poco tiempo, tal como lo ha hecho la Dirección de Siemens Gamesa desde que el pasado abril se hiciera efectiva la fusión”.

En este sentido, ha criticado los “constantes cambios” en el equipo directivo “con indemnizaciones millonarias de por medio”, la “polarización en el rumbo” de la nueva compañía que provoca “inestabilidad”, y la toma de decisiones que “discriminan a unos trabajadores con respecto a otros según su procedencia”.

Asimismo, ha censurado que se han dado dos 'profit warning' en un periodo de seis meses, la “falta de iniciativa” en la toma de decisiones del negocio, y la pérdida del valor de la acción en bolsa ya que “es la empresa de peor comportamiento en el IBEX 35 durante el 2017, habiendo perdido casi la mitad de su valor”.

UGT ha lamentado que, ante esta situación, la Dirección de Siemens Gamesa propone “como única solución dejar a 6.000 familias en la calle”. Por este motivo, ha solicitado la dimisión de Marcus Tacke como máximo responsable ejecutivo de la compañía y, por tanto, “también máximo responsable de esta mala gestión”.