El movimiento vecinal tacha la subida de tasas de Maroto de “rocambolesca”
Las primeras reacciones de varias asociaciones de vecinos a la propuesta de subida de precios y tasas públicas lanzada por el alcalde son unánimes: rechazo frontal. Las opiniones coinciden al calificar como “increíble” y “rocambolesco” el planteamiento del regidor de un incremento de la tasa de basuras de entre el 20 % y 40%, que se establecería en función del consumo de agua de cada familia y la utilización del garbigune municipal, entre otras variables. “Si el pasado año ya fue polémico por el tema del 'tasazo' a los pisos vacíos, en esta ocasión lo es más por tratar de ligar el recibo de las basuras con el consumo de agua y el uso del garbigune. ¡Pero si la gente ni tiene ocasión de usar el garbigune. No hay oportunidad de deshacernos de viejos electrodomésticos simplemente porque no compramos nuevos, no hay dinero!”, manifestaba Angel Mesón, miembro de la junta directiva de la Federación Alavesa de Asociaciones de Vecinos, FAVA en su primera valoración.
Los recibos de agua y las tarifas de las actividades de los centros cívicos también suben un 4% y un 20%, respectivamente, según recogen los planes económicos del PP. El portavoz de FAVA advertía que la capacidad de aguante del ciudadano está al límite ante las continuos incrementos de tarifas que pacede. “El poder adquisitivo está muy mermado. Los anuncios sobre subidas de precios se suceden y la gente no sé durante cuánto tiempo más va a soportar esta situación”, declara Mesón. En la misma línea se posiciona el portavoz de Salburua Burdinbide. Joseba Martínez de Guereñu hace memoria para calcular cuántas subidas han aplicado las administraciones y otras entidades privadas que afectan directamente al bolsillo del ciudadano. “Desde hace unos años pagamos más en todo pero tenemos menos de todo, sobre todo de servicios. Ese es el modelo de Javier Maroto”, comentaba Martínez de Guereñu. “Lo de querer cobrar las basuras dependiendo del gasto de agua doméstico es increíble. ¿Y por qué no en función de la gasolina que consume cada cual?”, añadía con asombro el representante vecinal. Los proyectos planteados por el alcalde sobre la dinamización del comercio y la ayuda al empleo, le parecen “palabras huecas, que no van acompañadas de las políticas concretas necesarias”, revelaba.
Incentivos sí, castigos no
Desde otro barrio nuevo de la ciudad, Zabalgana, manifestaban que pretenden evitar la típica valoración inicial de promesas incumplidas y pataleo por las tasas y más cuando no disponen de toda la documentación completa sobre la propuesta de ordenanzas. No obstante sí hacen hincapié en la apuesta por incentivar buenos comportamiento medioambientales frente a la penalización económica y las subidas “desproporcionadas” que lleva aparejada la fórmula de Javier Maroto para cobrar las basuras. “Nos parece inconcebible además que desaparezcan las deduccciones destinadas a aquellas familias con ingresos muy bajos, que apenas pueden llevar una vida digna”, explicaba un portavoz de Zabalgana Batuz. Desde la asociación reiteraban su emplazamiento a los grupos municipales a que recojan las aportaciones vecinales para lograr unos presupuestos participativos.
En este sentido, FAVA reclama a todos los grupos un mayor esfuerzo a la hora de recoger las aportaciones de la sociedad gasteiztarra para elaborar los presupuestos de 2014. La FAVA valora de forma positiva que se realice de una forma paralela la elaboración del presupuesto de ingresos y de gastos para que la ciudadanía tenga la oportunidad de valorar el aumento de determinados impuestos o tasas y en función de en qué partidas se propone gastar dichos ingresos.
La Federación quiere mostrar también su preocupación por la actual situación de la ciudadanía, por lo que propone que los presupuestos del año que viene contemplen partidas suficientes para atender temas como el fomento del empleo y la atención a las personas más desfavorecidas.
