Una historia ilustrada con igualdad
Los libros infantiles forman parte de los recuerdos de los niños y niñas y tienen un papel fundamental en su proceso de aprendizaje. Los clásicos de este género están plagados de estereotipos sobre el comportamiento en la familia, en el colegio o en la sociedad, estableciendo diferencias de los valores, actitudes, comportamientos y expectativas que se espera de los niños y las niñas, y también de los hombres y mujeres.
Una exposición en el Centro Cultural Montehermoso de Vitoria muestra hasta el 12 de enero, una serie de ilustraciones para avanzar en la igualdad además de visibilizar el trabajo de los ilustradores de estas publicaciones. Elena Odriozola es una artista que se dedica a la ilustración de libros infantiles. En la exposición pueden verse una selección de sus dibujos que componen el libro 'Eguberria. Tradiciones, canciones y cuentos navideños del País Vasco', que recibió el Premio Nacional de Literatura Nacional del Ministerio de Cultura al libro mejor editado en la categoría de libros infantiles y juveniles.
Odriozola reivindica el trabajo de los ilustradores en este tipo de libros en los que “más del 50% del contenido son los dibujos” que además tienen que atraer la atención del niño tanto como los textos. En cuanto al papel educador de las imágenes la artista es partidaria de “no adoctrinar” en la emisión del mensaje desde una perspectiva de género. “Yo me siento igual a los demás por eso me sale natural, no creo que haya que meter con calzador ciertos mensajes”, explica Odriozola sobre sus trabajos.
Por su parte el profesor de literatura vasca contemporánea de la UPV/EHU y crítico literario, Mikel Ayerbe, ofreció una conferencia dentro del proyecto 'Irudidunak' para reflexionar sobre la perspectiva de género en las imágenes de los álbumes ilustrados. A través de un recorrido de este género desde inicios del siglo XX hasta hoy día. “Como en todo, hemos avanzado menos de lo que quisiéramos, pero más que otros campos”, reconoce Ayerbe. Para el profesor es necesario avanzar en “atenuar en la masculinización de los personajes”, porque en este sentido hasta ahora solo se ha procurado ensalzar el papel femenino en los cuentos, “se ha intentado incluir piratas mujeres, ladronas, heroínas... pero también es interesante rebajar el papel predominante masculino”, apunta.
Otra de las carencias en las que se fija Ayerbe es en el pape de los educadores a la hora de explicar los libros infantiles, ya que fijan la mayoría de los esfuerzos en la comprensión lectora. “Los niños no aprenden a mirar las imágenes y a interpretarlas”, dice el profesor, por eso cree que es necesario hacer que los niños sean capaces de reinterpretar los libros infantiles desde un espíritu crítico.
