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El juez paraliza el desahucio de una familia propiciado por Kutxabank

Miembros de Stop Desahucios frente a una sede de Kutxabank.

Eduardo Azumendi

Kutxabank acaba de anunciar un beneficio de 54,1 millones de euros en el primer trimestre de este año, casi al mismo tiempo que un juez paraliza en la localidad de San Sebastián de los Reyes (Madrid) el desahucio de una familia que vive en una casa propiedad de Kutxabank. La coincidencia de los dos anuncios muestra la cara más dramática de la crisis: la sangría de los desahucios. En este caso, el juez lo ha paralizado y la entidad financiera asegura que negocia con la familia. “En todos los casos de desahucio”, insiste un portavoz de Kutxabank, “intentamos negociar”.

Sin embargo, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Alcobendas y San Sebastián de los Reyes le desmiente. “Solo ha simulado que negocia”. Kutxabank tiene la propiedad de dos viviendas: la de Lily, de 62 años (conseguida a través de una ejecución hipotecaria) y la de Bea (la hija mayor). Para el jueves 14 de mayo estaba previsto el desahucio de Lily, en cuya casa también vive su hija más pequeña, y posteriormente se ejecutará la de Bea. “Kutxabank no ha querido negociar con la familia; solo ha simulado que lo hacía”, recalca la plataforma.

El caso es que Lily avaló a su hija mayor, Bea. Pero con el tiempo, Bea y su marido perdieron el trabajo y han agotado la prestación. En estos momentos, reciben temporalmente un subsidio de 426 euros.La situación”, explican desde la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, “es dramática desde hace más de dos años; se ha agotado todo el colchón familiar. Es la cara del desempleo prolongado”.

En su día, Bea solicitó una carencia a la entidad en base a su situación sobrevenida de desempleo y su madre Lily se convirtió en deudor solidario con nulos derechos. “De esta forma, Kutxabank ha podido quedarse con las dos viviendas”, se lamenta la plataforma.

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