Ayudas para familias monoparentales que viven de alquiler en una única habitación
Se trata de una ayuda extraordinaria, que se ha puesto en marcha para dar una respuesta “a situaciones muy urgentes de familias enteras que viven en habitaciones de viviendas en alquiler compartidas”. El vicepresidente de Derechos Sociales, Miguel Laparra, ha explicado que el Gobierno acaba de aprobar una ayuda económica de emergencia con la que se pagará parte del alquiler de la vivienda completa para las familias monoparentales que viven en condiciones de hacinamiento. El presupuesto asciende a 200.000 euros.
La ayuda se concederá durante un año y servirá para pagar hasta el 60% del alquiler de la vivienda a la que entren a vivir el progenitor y un hijo. El porcentaje del precio del alquiler subirá hasta el 70% en el caso de un progenitor con dos hijos, y hasta el 80% en el caso de un progenitor con tres o más hijos. Así mismo, se establecen los topes de esta ayuda anual en 4.680 euros para el primer caso, 5.460 euros y 6.240 euros para los dos siguientes tipos.
Se trata de ayudas económicas directas, de pago único y que se realizarán en régimen de evaluación individualizada, es decir, se otorgarán por orden de solicitud hasta agotar la partida entre las familias que cumplan los requisitos. En este caso, se considera que este sistema es el más adecuado, ya que su finalidad es atender la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran determinadas familias monoparentales.
El vicepresidente Laparra ha señalado que en torno al 9% de las familias de Navarra son monoparentales, es decir, que son más de 8.000 hogares en los que un solo progenitor de hace caso de los hijos. La situación de muchas de estas familias es sumamente difícil, ha añadido el vicepresidente, puesto que viven en lo que se consideran condiciones de hacinamiento: toda la familia comparte una habitación en una vivienda de alquiler compartida. La insuficiencia de ingresos impide a estas familias alquilar una vivienda que no tengan que compartir. “Esta situación impide garantizar plenamente los derechos de los niños y niñas a un entorno de vida adecuado para su desarrollo”, ha puesto de relieve Laparra.
La situación de estas familias monoparentales ya fue denunciada tanto por el Defensor del Pueblo como por diversas plataformas sociales de apoyo a las familias, que venían reclamando largamente algún tipo de ayuda pública que permita a estas familias monoparentales romper con su situación de hacinamiento.
Laparra ha deseado que “estas ayudas, junto otros programas como la bolsa de alquiler de vivienda o el plan de vivienda del Gobierno de Navarra, puedan suponer un avance importante en el reconocimiento efectivo del derecho a una vivienda digna a toda la población navarra”.
