Podemos se muestra a favor de que se abone a los funcionarios la extra pendiente en 2016

La formación ha mostrado su “apoyo” a este sector, que, ha dicho, “está especialmente castigado por las políticas de recortes que impuso la Administración central y que el Gobierno anterior de UPN no dudó en aplicar; no sólo el recorte de la paga extra de 2012, sino también otras como la congelación salarial o la precarización progresiva de las condiciones de trabajo”.

Podemos ha señalado que “apoya” al Gobierno liderado por Uxue Barkos pero ha indicado que “no forma parte orgánica de él”. Y ha afirmado que “ratificamos que nuestro compromiso fundamental es con la ciudadanía, con nuestro programa electoral y con el acuerdo programático”.

SECTOR PÚBLICO

Según ha expuesto, “el funcionariado, como el resto de los trabajadores, es un sector de fácil control económico y al que resulta fácil para los gobiernos acudir a la hora de los sacrificios sociales”. “También resulta sencillo plantear los problemas en términos falsos, binarios, exigiendo a los funcionarios y funcionarias un nuevo esfuerzo de solidaridad como si no pudieran bajarse otras soluciones posibles”, ha indicado.

En ese sentido, Podemos ha manifestado que no les parece “suficiente” el argumento de “la difícil situación económica que indudablemente se ha encontrado el nuevo Gobierno y la postergación del pago de la extra en un período de tres años, hasta el 2018, asumiendo que hay necesidades más importantes que deben ser abordadas antes y que no existen otras posibles soluciones”.

Para Podemos, “este discurso dominante, que tiende a enfrentar a los de abajo con los de abajo, puede servir de coartada para el desprestigio del sector funcionarial, para incluso abonar la privatización de sus labores”. “Creemos que la imposición desde arriba y desde lejos de la estabilidad presupuestaria, de los números por encima de las personas, no debe asumirse como un pensamiento único y fatal”, ha dicho.

A su juicio, habrá que buscar otras soluciones e “indagar a fondo las posibilidades de la puesta en marcha de una reforma fiscal justa y redistributiva”. “En un país donde las cargas impositivas van sobre las espaldas de los trabajadores y trabajadoras, no debe castigarse más a un sector, el funcionariado que, pese a los recortes, se ha mostrado capaz de mantener la alta calidad de su trabajo”, ha señalado.

Ha indicado Podemos que “el peso” de la Administración Pública recae en los niveles más bajos, E y D, y “que los salarios de estos trabajadores y trabajadoras públicas no alcanzan los 1.000 euros en los niveles E y de los 1.200 en los casos de niveles D”. “Estamos ante trabajadores y trabajadoras que pueden verse también acuciados por las necesidades sociales”, ha dicho.