El bailarín Bluprint actúa este jueves en el campus de la Universidad de Navarra

Bluprint domina muchos estilos de danza (hip-hop, dubstep, funky) pero donde realmente se siente especial es en el estilo Animation. Este estilo expresa movimientos ondulatorios, ticks rápidos, mimo-clown, movimientos robotizados que tienen origen en parte en los personajes de ciencia ficción que se crearon a principios del siglo XX y en las películas del género de ciencia ficción donde personajes, ya sean monstruos, robots, androides o superhéroes tenían una forma característica de expresión corporal.

Bluprint se caracteriza por ser capaz de no hacer transiciones en cada beat de la música (por muy rápido y extraño que sea el sonido o conjunto de sonidos) llevando a la perfección cada movimiento, es decir, ejecuta cada beat o sonido.

Hector Dorian es un joven de 23 años nacido en Alaska, donde su madre y su padre, ambos militares, estaban destinados. Se educó en Los Ángeles donde estudió el High School sin pasar desapercibido para sus compañeros y profesores puesto que siempre estaba pensando en bailar y crear sus propias coreografías. No fueron pocas las veces que el profesorado llamaba a la madre para informarle que pese a su inteligencia dedicaba todo el tiempo a otras habilidades interrumpiendo la clase.

El amor por el baile le hizo pensar en crear su propia compañía de bailarines y unos pocos años después, ya en Atlanta, fundó junto a otros talentosos artistas como Marquese Scott el proyecto Dragon House. Tenía 19 años. Este proyecto artístico reúne a diversos artistas que pertenecen a distintos géneros dentro de las corrientes más vanguardistas del Dubsetp, Animation, Hip-hop y otras expresiones de danza urbanas.

El proyecto Dragon House implica el desarrollo de las nuevas tendencias de expresión corporal compartiendo y experimentando metodologías de interpretar las nuevas formas de entender la música más actual (electrónica, hip-hop, dubstep).