Advierten de la amenaza de una escalada en el conflicto armenio-azerbaiyano

La Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), que agrupa a seis antiguas repúblicas soviéticas, advirtió hoy de que el derribo ayer por Azerbaiyán de un helicóptero militar de las fuerzas separatistas de Nagorno-Karabaj amenaza con una escalada del conflicto armenio-azerbaiyano.

“Este peligroso incidente agrava la situación en la región”, se afirma en una declaración del secretariado de la OTSC, integrada por Rusia, Bielorrusia, Armenia, Kazajistán, Tayikistán y Kirguizistán, difundido por medios rusos.

La OTSC subraya que la situación en el Cáucaso Sur “se agrava cada vez más” y “existe el peligro de una escalada del conflicto” que Armenia y Azerbaiyán mantienen desde 1988 por el control de Nagorno-Karabaj, enclave armenio en territorio azerbaiyano.

Según la versión del Ministerio de Defensa de Azerbaiyán, el helicóptero, un Mi-24, cuyos tres tripulantes habrían muerto, fue abatido después de haber atacado posiciones del Ejército azerbaiyano en la línea de separación de fuerzas.

Por su parte, las autoridades de la autoproclamada república de Nagorno-Karabaj acusaron a las tropas azerbaiyanas de violar el alto el fuego y aseguraron que el helicóptero derribado realizaba ejercicios de instrucción.

La OTSC destacó que sólo durante este verano el régimen de alto el fuego fue violado en más de 1.500 ocasiones.

A finales de julio y principios de agosto trece soldados azerbaiyanos murieron en varios combates fronterizos, el mayor revés sufrido por las tropas azerbaiyanas desde que se declarara el alto el fuego supervisado desde 1994 por la OSCE.

Diariamente los francotiradores apostados a ambos lados de la frontera disparan contra objetivos en territorio enemigo, escaramuzas que se cobran anualmente la vida de un número indeterminado de soldados.

Recientemente, los presidentes de Armenia, Serge Sargsián, y Azerbaiyán, Ilham Alíev, reanudaron el diálogo sobre Nagorno-Karabaj durante una cumbre organizada en París por el presidente francés, François Hollande.

El conflicto entre los dos países vecinos del Cáucaso Sur se remonta a los tiempos de la antigua Unión Soviética, cuando el territorio azerbaiyano de Nagorno-Karabaj pidió su incorporación a la vecina Armenia tras lo que estalló una sangrienta guerra que causó unos 25.000 muertos.

Las tropas karabajíes y armenias ocupan todo el enclave y otros siete distritos, que se unieron a Armenia y crearon una “franja de seguridad” que representa un tercio del territorio azerbaiyano.