“Águila Roja” acaba con éxito la temporada y se prepara para luchar en el mar

“Águila Roja” concluye mañana en La 1 una temporada que, tras 17 capítulos, acumula una media de 4,5 millones de espectadores, un dato del que se siente “muy satisfecha” la productora ejecutiva de la serie, Pilar Nadal, quien avanza a Efe que en próximos capítulos el héroe enmascarado “luchará en el mar”.

Este es uno de los “esfuerzos” que, pese a los recortes de presupuesto sufridos por la producción de Globomedia, pone como ejemplo Nadal para conseguir que “Águila Roja” mantenga el interés de la audiencia.

“Todas las series tienen su propio desgaste, no hay ninguna que dure eternamente, pero estamos muy satisfechos de contar con 4,5 millones de espectadores en una quinta temporada, y de seguir siendo la ficción de largo recorrido más vista”, apunta la productora en una entrevista con Efe.

Con la sexta temporada ya grabada, Nadal, también jefa de guiones de “Águila Roja”, prefiere no dar más detalles de la séptima entrega, de 13 episodios, que comenzará a rodarse el próximo lunes.

El episodio de mañana, número 69 de la serie, contará con la reaparición de la Marquesa de Santillana, el personaje interpretado por Miryam Gallego, cuya maternidad dio pie en la serie a una trama de reclusión voluntaria para ocultar un embarazo fruto de su relación secreta con el Rey (Xavier Elorriaga).

El rol de la marquesa, personaje malvado que da pie a las intrigas cortesanas, fue cubierto por Sagrario de Castro (Loles León) y su hijo Jacobo de Castro (Carlos Areces), que continuarán en la próxima temporada, aunque “abiertos para ver cómo evolucionan, todavía no les matamos...”, apunta la productora.

Mañana se resolverá la búsqueda del héroe de la serie, Gonzalo de Montalvo (David Janer) de sus ancestros, y se verá el e encuentro con su madre, Laura de Montignac (Julia Gutiérrez Caba).

Otra de las aflicciones que arrastra el ninja enmascarado, la pulsión sentimental hacia su cuñada Margarita (Inma Cuesta), seguirá sin concretarse.

“Los fans piden más acercamiento entre Margarita y Águila Roja, pero lo cierto es que en todas las series clásicas, cuando unen a los protagonistas, se pierde esa tensión emocional y romántica, y al final hay que recurrir a las crisis de pareja”, explica Nadal.

La productora tiene también claro que buena parte del éxito de la serie es que su protagonista es “un héroe clásico, que trabaja para los demás”, y por tanto “es difícil verle en una vida doméstica, tomando la tortilla por la noche junto a su mujer”.

Nadal, que se inspira para las tramas en clásicos de la aventura como Dumas o Salgari, dice que TVE “jamás” le ha condicionado en lo creativo a la hora de escribir la serie, aunque que sí ha notado las “presiones económicas” derivadas de unos recortes que han sumado un 20 % sobre el presupuesto de hace dos años.

“Esta no es una serie de sofá, es de aventuras. Aquí necesitas los exteriores y que pasen cosas, porque no se puede vivir siempre de la casa de Gonzalo y del salón del palacio”, explica la productora.

De los ahorros en los tiempos de plató se saca dinero para incluir de vez en cuando “algo especial, una especie de premio al espectador”, que en la presente temporada se concretó en las luchas de gladiadores al estilo de un circo romano, en un episodio rodado en el yacimiento arqueológico de Segóbriga (Cuenca) y que próximamente llevará al “ninja” justiciero del siglo de Oro al mar.

“Águila Roja” estrenó temporada los lunes a partir del 6 de mayo pasado, cuando consiguió más de 5 millones de espectadores, cifra que ha repetido en otros cuatro episodios, aunque no ha vuelto a contar con esa audiencia desde que, tras el parón veraniego, pasó a los jueves.

Un cambio de día que “ha hecho más difícil estar donde estábamos”, señala Nadal, ya que “los lunes es el día de mayor consumo televisivo, como demuestra que ”El tiempo entre costuras“, ”Isabel“ y ”La Voz“ compitan bien”.