Álvaro Nadal acusa al independentismo de obligar a las empresas a cambiar de sede social

El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, ha afirmado hoy que el desafío independentista catalán está “obligando” a grandes empresas a cambiar de sede social, debido a la “gran incertidumbre” creada en Cataluña, algo que es “nefasto” para la estabilidad económica.

Momentos después de intervenir hoy en Valladolid en un foro organizado por el diario El Norte de Castilla sobre el futuro digital en España, el ministro se ha mostrado muy crítico con los que quieren “romper España sin ninguna lógica”, lo que “puede poner en peligro el esfuerzo y el trabajo realizado por dos generaciones”.

En este sentido, Nadal ha recordado cómo España llegó tarde a las dos primeras revoluciones industriales, lo que provocó que generaciones pasadas tuvieran que hacer “un tremendo esfuerzo” por convertir a España en la potencia que es hoy y que ahora se ve “amenazado” por planteamientos rupturistas “incomprensibles e inconcebibles, lo mismo que en los siglos pasados”.

Por este motivo, el ministro ha considerado que no tendría “perdón de Dios” que España dejara de atender asuntos de “vital importancia” para el futuro de la nación, como el proceso de transformación digital de todos los sectores económicos en España, por un movimiento “ilegal y anticonstitucional”.

Durante la clausura del foro, el ministro ha repasado alguno de los desafíos que deberá adoptar España en su proceso de conversión digital, como la instalación de fibra óptica o internet en las zonas menos accesibles, para lo que el Consejo de Ministros aprobará mañana una partida de cincuenta millones que tendrá como fin mejorar el acceso a la red a los pequeños municipios.

Por último, Nadal ha incidido las implicaciones que tendrá la revolución digital, tanto en los sectores productivos como en la Administración, caso de la seguridad nacional, momento en el que el ministro ha aprovechado para mandar un saludo a los cuerpos de seguridad del Estado en estos momentos “tan difíciles”.