Amberes inaugura una obra con un poema dedicado al desaparecido vasco Hodei Egiluz

La ciudad de Amberes inauguró hoy una obra formada por un conjunto de fragmentos de piedra del País Vasco en el que canteros han esculpido el poema que el poeta flamenco Stijn Vranken dedicó a Hodei Egiluz, un joven de Galdakao (Bizkaia) que desapareció en esa ciudad belga en octubre de 2013.

El poema en piedra de caliza recuerda desde este domingo entre los adoquines de una acera de la calle Koolkaai, donde se le vio a Hodei la última vez, al joven vasco y representa para su familia y para la ciudad de Amberes un “símbolo de esperanza” de que se resuelva por fin un caso que ha sumido en dolor a Gadalkao.

La obra fue inaugurada por el concejal de Desarrollo Urbano, Rob Van de Velde, y Vranken, quienes expresaron su apoyo a la familia de Hodei, respaldada en Amberes por una veintena de amigos y miembros de agrupación Hodei Bila, creada en Galdakao para fomentar la localización de este joven.

En el emotivo acto, la joven Maider Legarreta, acompañada por dos músicos con guitarra, interpretó una canción compuesta por ella misma basada en el poema de Vranken.

Los padres de Hodei, Koro y Pablo, así como las otras personas que viajaron a Amberes para apoyarles, sujetaban mientras una pancarta en la que se podía leer en grandes letras el nombre de su hijo y “missing” la palabra en inglés de desaparecido.

Para Pablo Egiluz, la obra es un “grito” del dolor que siente la familia, pero también de la “fuerza” y de la “esperanza” de que se aclare qué pasó en la madrugada del 18 al 19 de octubre de 2013 y conocer así el destino de su hijo, según dijo a Efe.

Hodei, titulado en Ingeniería Informática, de 23 años, se trasladó a Amberes en abril de 2013 para realizar unas prácticas profesionales en la empresa local Createlli, que en junio le ofreció un contrato de trabajo.

Su pista se perdió en la madrugada del 19 de octubre, cuando después de haber salido con unos amigos se despidió de uno de ellos para regresar a casa.

El concejal de Amberes, por su parte, explicó a Efe que el Ayuntamiento normalmente no autoriza este tipo de obras, pero en este caso ha hecho una “clara excepción” porque considera que “hay evidencias de que todavía hay una posibilidad” de encontrar a Hodei, “de que esta historia aún no ha terminado”.

Lo que se sabe es que el joven Hodei fue asaltado dos veces, pero las circunstancias que rodean su desaparición siguen sin aclararse.

“Esta obra puede ser un símbolo de esperanza para muchas personas. La ciudad de Amberes intenta con este caso individual dar esperanza a otras personas también para que sepan que, cuando ocurre algo así, quizás puede haber un final feliz, porque recientemente ha vuelto un niño desaparecido”, recalcó.

El poeta local de Amberes también señaló que la obra debe transmitir esperanza y a la ciudad belga el mensaje de que hay que seguir buscando a Hodei.

La obra ha sido creada con varios fragmentos de piedra caliza extraídos de una cantera del municipio guipuzcoano de Deba, que ha sido trasladada a la ciudad de Amberes.

Estas piedras, que en principio iban a ser usadas para construir un frontón, son representativas de los montes vascos y suponen un “medio de conexión” entre Bélgica y Euskadi, según la agrupación Hodei Bila.