Arístegui defiende legalidad de su actividad privada antes de ser embajador

El embajador de España en la India, Gustavo de Arístegui, diputado del Partido Popular entre 2000 y 2011, defendió hoy la legalidad de la actividad que realizó en el pasado como asesor para empresas españolas en el extranjero y aseguró que siempre cumplió “escrupulosamente con la ley”.

En respuesta a informaciones publicadas hoy por el periódico El Mundo y la Cadena Ser, Arístegui indicó a Efe que las acusaciones se deben a “diferencias profundas con un antiguo socio” y un intento de “extorsión”, y adelantó que se reserva “las acciones legales pertinentes”.

Aseguró que la actividad privada que ejerció hasta febrero de 2012 “estaba autorizada por las Cortes y era totalmente legal y compatible” con sus funciones públicas.

De acuerdo con las informaciones, Arístegui y el diputado del PP por Segovia Pedro Gómez de la Serna cobraron comisiones millonarias en el extranjero por lograr contratos para empresas españolas de gobiernos de África y Latinoamérica.

Los medios agregan que Arístegui y Gómez de la Serna, bajo la marca Voltar Lassen, registrada por ambos en la Oficina Española de Patentes y Marcas, han ejercido como conseguidores de contratos públicos para una veintena de empresas españolas en diversos países.

“Dejé mis actividades privadas en febrero o marzo de 2012, dos meses antes de ser nombrado embajador en la India, desde esa fecha hasta hoy no he tenido nada que ver con la sociedad que se menciona”, dijo Arístegui.

Agregó que se pidió “un dictamen a un letrado de las Cortes en excedencia para demostrar la legalidad de la actuación privada” y atribuyó las informaciones aparecidas al contexto político que vive el país y a una campaña de “extorsión” en su contra.

Subrayó que se trabajó “siempre para empresas privadas en el extranjero y ante privados y nunca se ha intervenido ante ninguna administración española publica autonómica o central”.

El exdiputado del PP indicó que tras dejar su actividad en la sociedad mencionada dejó la administración de la sociedad en manos de su hijo Borja, un “un profesional joven, bien preparado y cualificado”.

“Otras muchas personas de todos los colores políticos han hecho lo mismo en el pasado en circunstancias similares, conforme a las normas”, destacó.

El diplomático insistió en que “cumplió escrupulosamente con la ley de altos cargos e incompatibilidades” y que esa actividad “no solo fue legal sino legitima, honorable y noble”.

“Hemos contribuido a que empresas de prestigio y de renombre pudiesen explorar nuevos mercados y con ello ayudarles en la salida de alguna manera de la crisis. Fue nuestro pequeño grano de arena”, subrayó, al agregar que “estas empresas han contribuido a sacar a España de la crisis”.

Para Arístegui todas estas informaciones se deben a “diferencias profundas con un antiguo socio” y un intento de “extorsión” fundamentado en “mentiras y medias verdades”.

“Tanto Pedro Gómez de la Serna como yo nos reservamos todas las acciones legales pertinentes para la defensa de nuestra honorabilidad y de la legalidad de nuestras actuaciones”, afirmó.

Además, descalificó “la maliciosa implicación” que se ha tratado de hacer de su suegra, una señora, dijo, “muy respetada en su país, una mujer de negocios desde los años 80 que opera en los sectores de comercio, inmobiliario, promoción, construcción, agricultora, ganadería y consultoría”.