Asociaciones responden a Rivero que si no hay camas en los hospitales, que las ponga

El portavoz de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), Marciano Sánchez Bayle, ha respondido hoy al presidente canario, Paulino Rivero, que si “ha constatado que hacen falta camas, lo que tiene que hacer es ponerlas en funcionamiento; esa es su responsabilidad”.

En declaraciones a Efe, Sánchez Bayle opinaba así sobre la afirmación realizada ayer en la cadena SER por Rivero sobre que más de 400 personas siguen hospitalizadas en Canarias, a pesar de haber recibido ya el alta médica, “porque sus familias no los recogen”, que hoy ha matizado al asegurar que no culpa de ello a los familiares, porque está seguro de que “nadie quiere tener a un pariente hospitalizado”.

El portavoz de la FADSP ha señalado que no se puede culpar a los ciudadanos de una situación que es responsabilidad de las administraciones públicas.

A su juicio, “hay que tener en cuenta la realidad del país: muy pocas camas de media y larga estancia y muy pocas plazas sociosanitarias”.

A ello, según Sánchez Bayle, hay que unir que muchas familias tienen dificultades para hacerse cargo de sus familiares, por lo que ha pedido ponerse en la piel de los ciudadanos, a los que “desgraciadamente” las administraciones públicas “no les están dando una respuesta adecuada”, sino al contrario, “les están recortando los sistemas de protección social”.

A juicio de Sánchez Bayle, la situación denunciada por Rivero evidencia la situación “crítica” que atraviesa España, donde “la capacidad de respuesta de las personas con pocos recursos es muy pequeña”.

“No hay servicios, se ha recortado la ayuda a domicilio, se han recortado las subvenciones a la residencia”, ha denunciado el responsable de esta federación, quien ha recalcado que “los recortes se están llevando por delante prácticamente todo”.

Por otra parte, Carlos Amaya, portavoz de sanidad del CSIF, sindicato mayoritario entre los funcionarios, ha considerado que esta situación evidencia las carencias de los hospitales y el hecho de que las camas de agudos están ocupadas por enfermos que no deberían estar usándolas.

“Son problemas sociales que en estos momentos de crisis se ponen más en evidencia”, ha señalado Amaya, quien ha criticado la falta de coordinación entre los servicios sanitarios y sociales.