Aumentan a 14 los guerrilleros muertos en un bombardeo a un campamento de FARC

Bogotá, 2 ene EFE).- El número de guerrilleros de las FARC muertos en un bombardeo de las fuerzas de seguridad de Colombia contra un campamento del grupo insurgente ascendió de 13 a 14, dijeron hoy fuentes oficiales al informar sobre este operativo, que sigue en marcha.

El director de la Policía Nacional, el general José Roberto León, informó en una rueda de prensa de que en la operación “Fortuna”, desplegada desde la madrugada del 31 de diciembre sobre una zona rural del municipio de Mutatá, en el departamento regional de Antioquia (noroeste), sobrevivieron sólo dos guerrilleros.

Entre ellos figura la segunda jefe del “frente 5” de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), María Elda Ramírez, alias “Mayerly”, a quien se le atribuye el control de la producción y comercialización del 50 % de la cocaína que sale de la zona, así como diversos atentados y secuestros.

La Policía interceptó una comunicación entre esta guerrillera y otro combatiente en el que relata que tras el bombardeo están “mal” y que se encuentra herida, acompañada sólo por otra persona en el campamento.

“Mayerly” agregó que “no hay por dónde” salir de la zona y que aguardaban a ser recogidos. “Apenas somos dos vivos, el resto están todos muertos”, concluyó.

Según la Policía, esta guerrillera manejaba las finanzas y parte de la inteligencia del frente 5 en los municipios de Apartadó, Chigorodó y Mutatá, integrado por unos veinte insurgentes, incluido su compañero sentimental, conocido como “El Coste”.

Asimismo, se le atribuye responsabilidad en la activación de un artefacto explosivo que el 28 de marzo de 2009 dejó en Apartadó a 15 personas heridas, así como en el ataque de El Porroso, donde en 2005 murieron 19 soldados y cinco fueron heridos.

En 2002, según la institución, fue la responsable de un secuestro múltiple de ocho personas entre los municipios de Chigorodó y Mutatá.

El frente 5 actúa en pueblos que forman parte del Golfo de Urabá, un importante corredor de la droga en el norte del país, por su acceso al océano Atlántico y su proximidad con Panamá.

La operación “Fortuna” sigue en su fase de “consolidación”, pero hasta el momento ha permitido el decomiso de 13 fusiles, 5 AK-47, 4 M-16, 4 M-4 y dos escopetas de calibre 16, así como elementos logísticos, alimentos y documentación de interés para la inteligencia policial, agregó la fuente.

Las FARC y el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos abrieron en 2012 un proceso de paz que ya ha cumplido dos ciclos de conversaciones y que se reanudará en La Habana, sede del diálogo, el próximo 14 de enero.

Durante estas negociaciones está establecido que las partes sólo declararán un alto el fuego bilateral cuando se alcancen acuerdos concluyentes del conflicto, por lo que la fuerza pública continúa desarrollando sus operativos en el territorio nacional.

Sin embargo, las FARC declararon una tregua unilateral para la temporada navideña entre el 20 de noviembre y el 20 de enero, que según el Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (CERAC) han infringido en más de 13 ocasiones.

De hecho, tan sólo minutos antes de la medianoche del 31 de diciembre de 2012 se registró un ataque con explosivos contra una estación policial en Guapi, pueblo del departamento del Cauca en el Pacífico colombiano, que las autoridades achacan a las FARC.