Austria pedirá a España que no extradite a Turquía a dos escritores detenidos

El canciller austríaco, Christian Kern, anunció hoy que pedirá al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, que rechace la extradición a Turquía de dos escritores de origen turco detenidos en España por orden de arresto de Ankara a través de Interpol, pues duda del respeto a las garantías jurídicas.

“Ya resulta inaceptable que (el presidente de turco Recep Tayyip) Erdogan persiga a periodistas y activistas en Turquía. Pero que ahora trate de hacerlo en Europa supone llevar las relaciones de la Unión Europea y Turquía a un nuevo mínimo”, escribió hoy el jefe de Gobierno socialdemócrata en su perfil de Facebook.

Kern considera “escandaloso” que Turquía utilice un mecanismo internacional de cooperación policial para perseguir a voces disidentes y pide no tolerar está deriva “totalitaria” y de “desprecio hacia los derechos humanos”.

“Debido a las dudas sobre el Estado de Derecho (en Turquía) voy a pedir al jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, que use las posibilidades que tiene para impedir la extradición”, indicó Kern.

“Los intentos del presidente Erdogan de usar su poder en el exterior deben ser decididamente rechazados”, concluyó el canciller.

El jefe del Gobierno austríaco ha criticado en repetidas ocasiones en el pasado la deriva autoritaria de Erdogan y ha llegado a solicitar que se cierren las negociaciones de adhesión de Turquía a la UE.

Kern menciona en su escrito a Dogan Akhanli, un escritor alemán de 60 años de origen turco, detenido ayer en un hotel de la ciudad de Granada; y Hamza Yalçin, de 59 años, un periodistas y escritor sueco de origen turco detenido en el aeropuerto barcelonés de El Prat el pasado 3 de agosto.

A Yalçin se le acusa de insultar a Erdogan y de escribir propaganda para “una organización terrorista”, mientras que Akhanli, también crítico con el presidente turco, es conocido por sus trabajos sobre el “genocidio” cometido por el Imperio Otomano contra la población armenia, algo negado por Ankara y que supone un tabú en Turquía.

El Parlamento alemán reconoció el año pasado esas masacres como genocidio, lo que fue recibido por Ankara como una afrenta.

El abogado alemán de Akhanli, Ilias Uyar, criticó ayer en la prensa germana la detención del escritor como un “claro abuso del derecho”, al utilizarse normas policiales y jurídicas internacionales por el Gobierno turco en Ankara para acallar a la oposición y a las voces críticas.

Akhanli fue detenido en 2010 a su entrada a Turquía bajo la acusación de haber cometido un robo con homicidio en 1989, pero, según su abogado, cuando se produjeron los hechos, su cliente ni siquiera se encontraba en el país.

Tras un proceso, Akhanli fue absuelto, pero la resolución fue anulada en 2013, por lo cual el escritor ha vuelto a figurar en la lista de personas buscadas por las autoridades turcas.