Barroso: Cataluña quedaría fuera de la UE si se separa de España

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, reiteró hoy que una eventual separación de Cataluña del resto de España convertiría a esa región en “un país tercero”, fuera de la Unión Europea (UE).

En una conferencia de prensa conjunta en Madrid con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ambos fueron preguntados por los planes del Gobierno catalán de realizar una consulta popular en noviembre próximo sobre las aspiraciones independentistas.

Durao Barroso recalcó que la eventual separación de una parte de un Estado miembro de la UE “tendría consecuencias” desde el punto de vista de los tratados europeos.

“Si una parte de un Estado miembro se convierte en otro Estado, éste se convierte en lo que se llama un país tercero con respecto a la UE. Esto es claro y lo quiero decir para que no haya dudas”, dijo el presidente de la Comisión Europea.

Barroso no quiso “entrar en el debate” político sobre esta cuestión que, según subrayó, es “un asunto interno de España”, y tuvo la misma reacción al ser preguntado que sucedería si Escocia se independizara del Reino Unido.

Por su parte, Rajoy manifestó que aunque siempre ha estado abierto al diálogo con Cataluña, las decisiones “unilaterales, una detrás de otra” que se están adoptando sin “comunicárselas a nadie” ni buscar “un entendimiento” hacen “imposible dialogar”.

Rajoy respondió así al ser preguntado sobre la decisión adoptada el jueves por el Parlamento regional catalán de pedir al Congreso de los Diputados de España la transferencia de competencias para llevar a cabo una consulta soberanista en la región.

Al referirse también al caso de Escocia, Rajoy manifestó que “no estamos aquí para especular” y aludió a un informe del Gobierno británico que recalca que si se declarara independiente, este territorio quedaría fuera de la UE y de Naciones Unidas.

“Quedaría fuera de todos los tratados internacionales de los que forme parte con motivo de su pertenencia al Reino Unido. En el caso de que la moneda fuera el euro, que no lo es, quedaría fuera del euro, por tanto, quedaría sin el amparo del BCE, lo único que eso generaría es un proceso de empobrecimiento de incalculables proporciones para todas las personas que vivieran en esas regiones que tomasen esas decisiones”, subrayó Rajoy.

Poco antes, la vicepresidenta del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, había reiterado también que la consulta soberanista catalana es “contraria a la Constitución” y por tanto “no es posible y no puede celebrarse”, y ha prometido que el Ejecutivo será “firme” defendiendo la Carta Magna.

“Tenemos bien claro que con arreglo a nuestras normas esa consulta de autodeterminación no es posible y no puede celebrarse”, añadió la vicepresidenta del Gobierno español.