El embajador cesado en Bélgica por absentismo y abuso de autoridad se reincorpora al Ministerio en Madrid

El diplomático fue destituido de sus funciones el pasado 9 de abril, después de que una inspección interna detectara “anomalías muy graves” en el funcionamiento de la misión, como el “absentismo” del embajador y su abuso de autoridad “a través del miedo, la amenaza y el enfrentamiento”.

Como es habitual cuando un diplomático es cesado de su cargo, Matellanes ha tenido un mes de plazo, desde la publicación de su destitución en el BOE, para organizar su salida de Bruselas. Se trata de un periodo de cortesía con el que cuentan los funcionarios para que hagan la mudanza y realicen los trámites oportunos antes de abandonar el país.

Vencido ese plazo, Matellanes había regresado este martes a Madrid, donde se ha reincorporado a los servicios centrales del departamento que dirige José Manuel García-Margallo.

Tras tener conocimiento del informe que la Inspección General de Servicios realizó sobre el embajador, y que alertaba de que en la misión se había registrado “un número inusualmente alto de bajas por depresión”, el Sindicato Independiente del Servicio Exterior pidió en un comunicado interno al ministro José Manuel García-Margallo el cese de Matellanes y la apertura del correspondiente expediente informativo.

Preguntado al respecto por la prensa, el ministro --que fue quien ordenó la inspección extraordinaria a la Embajada-- delegó en su subsecretario la decisión de expedientar o no al diplomático, una medida que por el momento no se ha concretado.