La Ceapa atribuye la “sobrecarga” de deberes al fracaso del sistema educativo

La Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (Ceapa) considera que los estudiantes tienen una “sobrecarga” de deberes, lo que representa “en gran medida un fracaso” del sistema educativo.

En una nota, asegura que se ha “incrementado” en los últimos años el tiempo que los menores han de dedicar en casa a tareas escolares, “lo que demuestra que la escuela no responde adecuadamente a las necesidades educativas”.

Asegura que recibe habitualmente las quejas de las familias por los deberes que el profesorado encarga diariamente a los alumnos menores.

“Los niños y niñas ya deberían cumplir -defiende- el proceso de enseñanza y aprendizaje en la escuela y en el horario escolar. El alumnado encuentra en las aulas una enseñanza poco motivadora, poco práctica y alejada de la cultura audiovisual en la que ha crecido, que sigue fundamentándose en el libro de texto y en el aprendizaje memorístico”.

Añade que los deberes “provocan desigualdades sociales”: hacerlos mejor o peor “depende del nivel socioeconómico y cultural de su familia y de su entorno”, pues algunos padres incluso pueden recurrir a clases particulares y otros no, además de que cuentan en muchos casos para las calificaciones.

“Los menores necesitan tiempo para realizar actividades deportivas, culturales o de esparcimiento, que también contribuyen a su desarrollo personal”, según Ceapa.

Como alternativa, propone la reforma del currículum educativo con vistas a una enseñanza más motivadora, práctica y centrada en la adquisición de competencias básicas propias de estos tiempos y una formación del profesorado adecuada en este sentido.

También pide que los deberes sólo sean una formación “complementaria”, con el apoyo de bibliotecas, museos, asociaciones y recursos del entorno escolar, actividades de lectura, investigación y utilización de tecnologías de la información y la comunicación, sin que fuera necesaria la ayuda de un adulto.

Por último, reclama la extensión a todos los centros educativos de los programas de acompañamiento educativo en primaria y de refuerzo en secundaria (PROA) para los alumnos con dificultades de aprendizaje.