Cerezos en flor japoneses reciben en su punto álgido a los Reyes de España

La visita de los Reyes de España a Japón iniciada hoy coincide con el momento álgido del “sakura” o los cerezos en flor, que marca el inicio de la primavera y es una de los acontecimientos más esperados del año en el país asiático.

Los monarcas podrán observar los cientos de cerezos que rodean el Palacio Imperial de Tokio, residencia del emperador Akihito, o los árboles cercanos al Palacio Akasaka, donde serán recibidos por el primer ministro nipón, Shinzo Abe.

Los Reyes tendrán oportunidad de admirar este espectáculo también fuera de la metrópoli, durante su visita a la prefectura de Shizuoka (al sur de Tokio), justo antes de regresar a España.

La Agencia Meteorológica de Japón anunció el pasado 21 que los cerezos estaban empezando a florecer en el templo Yasukuni de Tokio, noticia que marca el inicio del “sakura” en la ciudad.

Sin embargo, unas temperaturas más frías de lo que cabría esperar en este inicio de la primavera han retrasado el punto de máximo esplendor de los cerezos, que comienzan ahora a decorar las calles y que acompañarán a don Felipe y doña Letizia durante su visita de cuatro días a Japón.

Durante este breve periodo de “sakura” -que dura apenas dos semanas-, miles de japoneses festejan la llegada de la nueva estación y acuden a los parques de la capital nipona para celebrar multitudinarios “hanami”, o picnic bajo los cerezos en flor.

Japoneses trajeados, familias y grupos de amigos, cargados con cajas tradicionales de comida “bento”, bolsas de cerveza y sake (licor de arroz), forman la estampa habitual de esta época.

La fascinación, sin embargo, va más allá de los árboles: el “sakura” se convierte en un filón para comercios y cadenas, que aprovechan esta época para comercializar productos diseñados exclusivamente para la ocasión.

Restaurantes o cafeterías ofrecen “saborear” el “sakura” a través de café, té, chocolate e incluso cócteles y cerveza.

Jabones y mascarillas faciales, zapatillas de deporte y relojes de edición limitada completan el variopinto surtido de productos que pretenden mantener vivo el recuerdo de este único y efímero espectáculo.