Colombia, un importante socio de Venezuela ausente en el acto de apoyo a Chávez

El Gobierno colombiano decidió no participar en el acto convocado hoy en Caracas por el oficialismo en solidaridad con el presidente venezolano, Hugo Chávez, pese a que ambos países mantienen una histórica relación bilateral y comercial.

Una frontera común de 2.219 kilómetros y una larga tradición de comercio y convivencia convierte a estos países en vecinos y socios “condenados” a entenderse, aunque en los últimos años sus relaciones políticas pasaron por momentos difíciles.

Esa obligación natural de entendimiento se empañó por la ruptura de relaciones diplomáticas, restablecidas en 2010 con la llegada al poder en Colombia de Juan Manuel Santos, un pragmático que ha buscado en Chávez apoyo incluso para negociar con la guerrilla de las FARC.

Pese al buen momento por el que pasan las relaciones entre Colombia y Venezuela, y aunque varios mandatarios de América Latina participan hoy en los actos de Caracas, Santos decidió no viajar.

En principio, el presidente colombiano tenía previsto asistir a la toma de posesión de Chávez, pero al no poder asumir éste su cargo para el nuevo mandato a causa de su delicado estado de salud, Santos rehusó ir a Caracas.

Para el doctor en Ciencia Política y profesor de la bogotana Universidad Javeriana, Fernando Giraldo, no hay “ningún gesto enemistoso” en la decisión de Santos, que a su juicio busca sólo “guardar prudencia sobre la aguda e incierta situación política de Venezuela”.

Giraldo descartó así en declaraciones a Efe que algún miembro del Gobierno venezolano, incluido el propio Chávez, pueda sentirse ofendido.

Desde que Santos y Chávez restauraron las relaciones rotas durante el Gobierno de Álvaro Uribe (2002-2010), ambos se han referido al país vecino como “hermano”, conscientes de que es imprescindible tener buenas relaciones pese a las divergencias ideológicas, ya que Chávez se declara socialista “bolivariano” y Santos es un liberal que gobierna su país de un modo muy diferente.

Hoy las dos naciones se benefician de un acuerdo comercial que pretende recuperar el comercio bilateral hasta los 3.000 millones de dólares este año, después de que cayera desde los 7.000 en 2007.

Además tienen una fructífera cooperación en seguridad que se ha saldado con decenas de capturas de narcotraficantes y hasta guerrilleros colombianos al otro lado de la frontera.

Esta relación no está en peligro, según Giraldo, y tampoco el proceso de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que contó con la “modesta ayuda” de Chávez para sentarse a negociar, según reconoció el mismo presidente venezolano.

Incluso Santos ha admitido que su colega venezolano ha sido “fundamental en ese acercamiento y este proceso de paz”, que se lleva a cabo en Cuba.

En La Habana sigue hospitalizado Chávez desde hace casi un mes, cuando fue operado por cuarta vez del cáncer que padece.

El presidente venezolano se encuentra en situación estacionaria, según los informes más recientes, con una insuficiencia respiratoria producto de una infección pulmonar contraída en el postoperatorio.