Comienza la CPAC, la gran reunión anual de conservadores en Estados Unidos

La Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), la mayor reunión anual de conservadores en Estados Unidos, abrió hoy sus puertas, y hasta el viernes acogerá a a las afueras de Washington a los pesos pesados del Partido Republicano, incluido el presidente del país, Donald Trump.

CPAC es considerado uno de los grandes eventos políticos estadounidenses y este año cuenta con mayor expectación si cabe dado el ascenso al poder del magnate inmobiliario, quien abanderó durante su campaña una política contraria al “establishment”.

La Conferencia, que es un espacio para discursos políticos, pero también una herramienta de reclutamiento y entrenamiento para aspirantes conservadores, también contará con algunos de los miembros más reconocidos del equipo de Trump, como sus asesores, Kellyanne Conway y Steve Bannon, o el vicepresidente, Mike Pence.

Serán cuatro días de discursos, mesas redondas, discusiones y desayunos de trabajo, que este año brillarán especialmente después de que los republicanos lograran recuperar la Casa Blanca, y además cuenten con la mayoría en las dos cámaras del Congreso.

Así pues, además de Trump, que intervendrá en la última jornada, el viernes, también harán acto de presencia figuras de la esfera internacional como el eurófobo británico Nigel Farage, antiguo líder del Partido por la Independencia (UKIP) y uno de los políticos que más presionaron a favor de la salida de Reino Unido de la Unión Europea.

Pero esta no será la primera vez que Trump intervenga en la CPAC, pues si bien el pasado año, como aspirante presidencial, canceló en el último momento su discurso por motivos de agenda de campaña, en 2011 sí tuvo la oportunidad de hacerlo, y con un mensaje muy similar al actual.

Ya entonces, Trump acusó a los líderes estadounidenses de ser “débiles e ineficaces”, pidió un “comercio justo” y criticó a China por manipular su moneda, a la vez que puso como ejemplo sus logros en los negocios, argumentando que Estados Unidos necesitaba un líder como él para revitalizar Washington.

La conferencia, que suele tomar el pulso al sentir de los conservadores, escuchará de nuevo a Trump, pero esta vez como presidente, y será el escaparate de una nueva corriente política dentro del Partido Republicano, la que ha definido el nuevo mandatario.