Condenada por una denuncia falsa a su exmarido asegura que sufrió un nuevo maltrato

Una mujer que fue condenada por una denuncia falsa contra su exmarido, que pasó once meses preso por ello, ha mantenido hoy en el juicio que es real otra acusación que presentó por maltrato, que la Fiscalía también considera falsa y por lo que le pide una multa de 4.050 euros.

El juicio contra la mujer, en el que también estaba acusado un testigo por falso testimonio, ha quedado visto para sentencia en el juzgado de lo penal 14 de Sevilla al tercer intento de que se celebrara.

La Fiscalía pedía 18 meses de cárcel y el pago de una multa de 7.560 euros por sendos delitos de denuncia falsa y falso testimonio para la mujer, R.V.B., y también solicitaba un año y medio de prisión para un testigo que mintió en el juzgado al asegurar que había visto la agresión.

En el juicio, la Fiscalía ha rebajado la petición para la mujer a una multa de 4.050 euros y de 540 euros para el acusado porque entiende que ambos alteraron la verdad pero no faltaron a ella, lo que supone la aplicación de un artículo distinto del Código Penal que les beneficia.

El fiscal ha recordado que esta denuncia fue archivada primero por el juzgado de violencia y después por la Audiencia de Sevilla.

El hombre que pasó once meses en la cárcel por la denuncia falsa, José Antonio Santos, fue denunciado de nuevo por su exmujer en diciembre del 2014, una iniciativa judicial que aún no se ha resuelto.

Antes del juicio de hoy, el abogado de la acusada ha intentado llegar a un acuerdo con el exmarido, a lo que éste no accedió porque, según dijo, querían “llegar hasta el final” y no le parecía castigo suficiente el año y medio de multa que proponía su letrado.

Tras el juicio, el exmarido ha explicado a los periodistas que solo quiere que la exmujer le deje “tranquilo” y que le castiguen porque sostiene que con tantas denuncias falsas, además de perjudicarle a él, “hace mucho daño a las mujeres que de verdad son maltratadas”.

En el juicio, la mujer ha reiterado que su exmarido le tiró y arrastró por el suelo, y que finalmente le denunció porque le convenció el hombre que le atendió, que también se sentó en el banquillo de los acusados.

El acusado, por su parte, ha mostrado su “arrepentimiento” por todo lo ocurrido en este caso y ha reiterado que ayudó a la mujer, a la que llevó en su coche al hospital, porque creía que estaba atendiendo a una víctima de la violencia machista.

Las dos peritos que han declarado en el juicio han coincidido en afirmar que la mujer no presentaba ni siquiera enrojecimiento en las zonas en las que dijo que había sido golpeada con las piernas y los puños.

El exmarido ha atribuido esta denuncia de mayo de 2011 que se enjuiciaba hoy a la demanda que interpuso contra ella porque incumplía el régimen de visitas respecto al hijo que tienen en común.