Cosidó reclama mejoras legales y más cooperación para combatir el terrorismo

El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, ha resaltado hoy la necesidad de “mejorar la legislación” para que ésta se adapte a las formas “dinámicas” que adopta el terrorismo e incrementar la cooperación internacional para combatir la amenaza terrorista.

Cosidó, que ha clausurado en Torremolinos (Málaga) un encuentro de la Interpol sobre la amenaza de los combatientes trasnacionales, ha afirmado en su intervención que esa mejora de la legislación debe permitir dar “una respuesta penal más eficaz a las detenciones de miembros de organizaciones terroristas”.

También considera necesarias “nuevas herramientas tecnológicas capaces de captar la información, gestionarla y analizarla” y “reforzar” la cooperación internacional, “porque ésta es una amenaza global y la respuesta tiene que ser común”.

Por ello, no es suficiente “la cooperación bilateral que España mantiene con muchos países”, sino que son precisos también “mecanismos de cooperación multilateral”, en Europa por ejemplo a través de la Europol, mientras que la Interpol “es la única organización que puede dar una perspectiva mundial”.

Ha recordado que España “ha sido uno de los países de Europa más castigados por el terrorismo, con más de mil víctimas asesinadas por diferentes grupos terroristas en las últimas décadas”.

Esa “dura experiencia española” ha permitido “obtener muchas lecciones y desarrollar capacidades muy importantes para enfrentarse a esta amenaza”.

En este sentido, ha apuntado que en el plan estratégico del Cuerpo Nacional de Policía “el terrorismo sigue como la máxima prioridad, porque no es sólo una amenaza para los ciudadanos, sino también para la libertad, la democracia y el Estado de Derecho”.

Cosidó ha citado la reciente detención de dos ciudadanos chilenos por la colocación de un artefacto explosivo en la basílica del Pilar de Zaragoza, a los que se les imputan otros hechos similares, lo que supone “la mejor muestra de que el anarquismo insurrecionalista que ha prendido en el sur de Europa es una amenaza real a la que hay que hacer frente”.

Asimismo, ha resaltado la lucha contra el yihadismo con la desarticulación de redes “que operaban en España para la captación y envío de terroristas a escenarios de conflicto, en particular Mali y Siria”.

Durante 2013 han sido detenidos un total de 58 terroristas yihadistas y diez de ETA, según Cosidó, que ha aludido además a los denominados “terroristas solitarios”, que actúan de forma aislada pero pueden causar un enorme daño“.

Otra amenaza es el “ciberterrorismo”, que obliga “a mejorar la protección de las infraestructuras críticas de información y comunicaciones y desarrollar capacidades tecnológicas para hacer frente a las investigaciones en este campo”.

Sin embargo, “lo más peligroso” a su juicio es “la combinación de la amenaza terrorista con la proliferación de armas de destrucción masiva”.

“Las nuevas amenazas terroristas obligan a cambiar la perspectiva, y ya no basta con detener a los autores del crimen, sino que tenemos la obligación de neutralizar estas amenazas antes de que la acción criminal haya sido consumada, y esto es más difícil”, ha añadido Cosidó.

Ha advertido de que los Estados “que de cualquier forma practican, utilizan, amparan o apoyan el terrorismo deben ser proscritos de la comunidad, y los demás, los Estados decentes y normales, tienen la obligación de estar unidos en esta batalla común contra el terrorismo”.

Cosidó ha agradecido a muchos de los países participantes en este encuentro su colaboración “para conseguir el objetivo de derrotar a ETA”, porque “sin su ayuda no se habría podido estar en esta situación”, aunque les ha pedido que “sigan ayudando hasta conseguir la total desaparición de la banda terrorista que tanto daño ha hecho a España”.